Los deportes de exhibición más curiosos de los Juegos Olímpicos de Invierno
No podrá verlos en el programa de Beijing 2022, pero estos deportes de invierno de exhibición dejaron su huella en la historia olímpica.
Algunos deportes que hoy son fundamentales en los Juegos Olímpicos empezaron su camino como deportes de exhibición. Se mostraban con la intención de promover una actividad, pero fuera del programa oficial de competición. En ocasiones algunas de estas disciplinas pasaron el corte y lograron establecerse en el programa olímpico, como fue el caso del curling o el patinaje de velocidad en pista corta. Sin embargo otros no sobrevivieron o simplemente mantuvieron su popularidad al margen de los Juegos.
En el caso de los Juegos Olímpicos de Invierno, no puede negarse que los esquiadores y los patinadores han demostrado una enorme creatividad a la hora de inventar nuevos deportes, incluso a pesar de no haber logrado mantenerlos dentro del programa. Estos son los cinco deportes de exhibición más curiosos de los Juegos Olímpicos de Invierno:
Ballet de esquí
A muchos aficionados al patinaje artístico les sorprenderá saber que este deporte ¡tenía un “familiar” en la nieve! La prueba fue una de las tres pioneras del esquí acrobático, junto a los ya tradicionales moguls y los aerials.
Esta disciplina estuvo presente como deporte de exhibición en Calgary 1988 y Albertville 1992. Los bailarines de esquí presentaban una serie de saltos y movimientos de baile en una pista de nieve – con música de fondo, obviamente – y los jueces los evaluaban de acuerdo al mérito técnico y artístico.
Los atuendos llamativos y la banda sonora expresaban perfectamente el espíritu rebelde del esquí acrobático. Sin embargo, el ballet de esquí tuvo problemas con algunas de las regulaciones necesarias y perdió empuje. A comienzos del siglo XXI, se convirtió en una (extremadamente divertida) anécdota del deporte de invierno.
Carreras de trineos de perros
Sería correcto decir que hubo perros compitiendo en los Juegos Olímpicos, pero solo en un deporte de demostración en Lake Placid 1932. Como ocurre con otras disciplinas de invierno, el trineo tirado por perros se desarrolló inicialmente como medio de transporte en la nieve - en este caso, en Alaska - y acabó convirtiéndose en un deporte.
En la competición de Lake Placid, cada trineo era tirado por un grupo de seis perros (con un atleta en el trineo) a través de un recorrido de 25.1 millas (cerca de 40 kilómetros). El trineo podía alcanzar velocidades de hasta 30 km/h. En caso de que un perro se lesionara, el atleta tenía que llevar al animal en su trineo hasta el final de la carrera. El medallista de oro Emile St. Godard es el único representante de esta disciplina en el Salón de la Fama del Deporte Canadiense.
Si cree que 40 kilómetros son demasiado, piense que la Iditarod Trail Sled Dog Race, que se celebra cada año en Alaska, son 1.700.
Patrulla militar
Si el biatlón se ha consolidado como deporte olímpico, es en buena medida gracias a su “padre”, la patrulla militar, que formó parte de la primera competición oficial de los Juegos Olímpicos de Invierno en Chamonix 1924. En otras tres ediciones (1928, 1936 y 1948), esta disciplina estuvo presente como deporte de exhibición.
La patrulla militar es una combinación de esquí de fondo y tiro (¿le suena familiar?), pero es un deporte de equipo, con cuatro miembros en cada patrulla y uno de ellos como oficial.
Los participantes debían recorrer 25 kilómetros como grupo, todos con uniforme militar y mochilas de 24 kilos. La parte de tiro tenía lugar al final de la prueba.
El biatlón sustituyó a la patrulla militar a partir de Squaw Valley 1960. Y afortunadamente, ¡los biatletas no tienen que cargar con una mochila que pesa como un niño!
Skijoring a caballo
Uno de los deportes más alternativos de la historia de los Juegos Olímpicos es el skijoring a caballo, donde un esquiador avanza tirado por caballos. La competición puede disputarse en un óvalo o con obstáculos.
Incluido como deporte de exhibición en St. Moritz 1928, los anfitriones suizos coparon el podio entero.
Actualmente, las únicas competiciones olímpicas a caballo son la hípica y el pentatlón moderno en los Juegos de Verano.
Bandy
Un híbrido entre el hockey y el fútbol, el bandy, también conocido como banty o hockey ruso, fue un deporte de demostración en Oslo 1952. Es extremadamente popular en Rusia y los países escandinavos y está considerado por muchos como el precursor del hockey moderno.
Las principales similitudes con el hockey sobre hielo son que los jugadores patinan sobre hielo y los atuendos, pero el stick es curvado. Los porteros no usan un stick pero sí pueden emplear las manos para parar la pelota. De hecho, esa es la gran diferencia con el hockey sobre hielo: se juega con una pelota, no con un puck. Los equipos pueden tener hasta 11 jugadores y los partidos se dividen en dos mitades de 45 minutos (por si la influencia del fútbol no era evidente...).
El fútbol y el bandy también tienen en común la regla del fuera de juego y la prohibición de jugar por detrás de las porterías.
En Oslo, Suecia, Noruega y Finlandia ocuparon el podio. El bandy no llegó muy lejos en los Juegos Olímpicos, pero todavía es uno de los deportes de invierno más practicados en el mundo.