Diez momentos increíbles de los Juegos Olímpicos de Invierno
Revive momentos inolvidables de la historia reciente de los Juegos Olímpicos de Invierno. Desde la asombrosa recuperación de Hermann Maier hasta la heroicidad de Tara Lipinski, pasando por la suerte de Steven Bradbury.
Con velocidades increíbles, alturas de vértigo y un gran espíritu competitivo, la historia de los Juegos Olímpicos de Invierno está llena de momentos asombrosos.
Desde la increíble recuperación de Hermann Maier (también conocido como Herminator) en Nagano 1998, al drama de la rivalidad en hockey sobre hielo entre Estados Unidos y Canadá en Salt Lake City 2002, pasando por aquel final agónico de skicross en Sochi 2014, Olympics.com te ofrece un repaso en vídeo de 10 momentos increíbles de los Juegos Olímpicos de Invierno.
Nagano 1998: el accidentado doble oro de Hermann Maier
Cuando Hermann Maier aterrizó en Japón para competir en Nagano 1998, aún no había ganado un gran título internacional. En su primera prueba, el descenso, sufrió un grave accidente cuando bajaba a unos 105 km/h.
Pero unos días más tarde, no solo tomó la salida en el supergigante y el eslalon gigante, sino que ganó la medalla de oro en las dos pruebas. Y así nació una leyenda olímpica.
PyeongChang 2018: cuando Felix Loch perdió sus superpoderes
En PyeongChang 2018, el piloto alemán de luge Felix Loch, vigente campeón olímpico y leyenda de este deporte, perdió su oro (y quedó fuera del podio) en una prueba que lideraba después de las tres primeras carreras. En la cuarta y última manga, Loch cometió una serie de fallos inexplicables que le acabaron relegando a la quinta plaza. ¡Un desastre!
Loch había ganado los dos anteriores oros olímpicos en Vancouver 2010 y Sochi 2014. Pero, como a veces pasa en el deporte, el sueño acabó en pesadilla.
Lillehammer 1994: la derrota más dolorosa de Noruega en esquí de fondo
Seguramente muchos de los 30.000 aficionados noruegos que se habían dado cita allí aquel día todavía piensen en los 0.4 segundos que privaron a Bjorn Daehlie y compañía de lograr la tan ansiada medalla de oro en el relevo 4x10 km masculino de esquí de fondo en Lillehammer 1994.
El poderoso cuarteto noruego (Vegard Ulvang, Bjorn Daehlie, Thomas Alsgaard, Sture Sivertsen) se vio derrotado por el equipo italiano (Maurilio De Zolt, Giorgio Vanzetta, Marco Albarello, Silvio Fauner) y no pudo darle a su afición ese esperado triunfo. Aunque el legendario Daehlie ganó 12 preseas olímpicas, la memoria de aquella agónica derrota por centímetros seguro que le sigue doliendo incluso después de tantos años.
Salt Lake City 2002: la victoria de infarto de Canadá en hockey sobre hielo
La competición femenina de hockey sobre hielo se estrenó en el programa Olímpico para Nagano 1998 y, cumpliendo con los pronósticos, Canadá y Estados Unidos se vieron las caras en la final.
Estados Unidos ganó aquel partido por 3-1, pero Canadá selló la revancha cuatro años más tarde en Salt Lake City 2002, rompiendo una racha de ocho derrotas consecutivas contra sus vecinas para ganar por 3-2 en la final. La importancia de esa victoria se hizo evidente en la celebración canadiense.
PyeongChang 2018: el doblete mágico de Ester Ledecka
Han pasado cuatro años, pero la hazaña de Ester Ledecka en el supergigante olímpico de PyeongChang 2018 todavía da que hablar. La austriaca Anna Veith fue en cabeza durante gran parte de la prueba y parecía tener el oro asegurado, pero no contaba con esa (aún) desconocida esquiadora checa, que tendría la última palabra.
Ledecka, con 23 años, no había conseguido ningún resultado destacable en las pruebas de supergigante, lo cual podría explicar su reacción al saber que había ganado.
Pero aún quedaba más, porque solo unos días más tarde, ya en su especialidad, la atleta checa ganó el oro en el eslalon gigante paralelo de snowboard. Se convirtió así en la primera mujer de la historia en ganar dos medallas de oro en dos deportes distintos en la misma edición de los Juegos Olímpicos de Invierno.
Salt Lake City 2002: el oro inesperado de Steven Bradbury
Después de una década marcada por la mala suerte, incluyendo lesiones serias que trastocaron su carrera, el patinador australiano de pista corta Steven Bradbury recibió su parte de karma con intereses con uno de los oros más increíbles de la historia en la final masculina de los 1000 m en pista corta de Salt Lake City 2002.
Bradbury, que ya había tenido la fortuna de su parte para llegar a la final (gracias a las repescas y la descalificación de otros rivales), ganó el oro gracias a que los cuatro rivales que tenía por delante se fueron al suelo en los metros finales de la carrera. Al fin un golpe de suerte para un patinador que hasta entonces había sido muy desafortunado.
Vancouver 2010: Shaun White hace historia con el primer Doble McTwist 1260°
El vigente campeón olímpico ya tenía el oro en el bolsillo cuando se disponía a atacar la segunda manga. Con 46.8, Shaun White ya tenía asegurada la mejor puntuación, pues el finlandés Peetu Piiroinen se había quedado en 45.0 en su mejor intento. Así que en lugar de asegurar, el Tomate Volador quiso coronarse a lo grande, y firmó el primer 'Tomahawk' de la historia, también conocido como Doble McTwist 1260°.
Sochi 2014: un final agónico en skicross
La segunda competición olímpica de skicross en Sochi 2014 dejó muchos momentos para saborear. Aunque el podio fue 100% francés (oro para Jean-Frédéric Chapuis, plata para Arnaud Bovolenta y bronce para Jonathan Midol), la primera carrera de los cuartos de final nos dejó un final sorprendente: solo un participante cruzó la meta sobre sus esquís. Los otros tres se cayeron justo antes de llegar.
El suizo Armin Niederer, que iba último, acabó en primera posición. Sus rivales tuvieron que esperar un poco más para saber en qué posición habían llegado.
(A partir del 1:38 en el vídeo)
Calgary 1988: Eddie el Águila vuela alto
Para Michael Edwards, participar en unos Juegos Olímpicos de Invierno era un sueño muy lejano. No era un atleta de élite y no había sido elegido para el equipo de esquí alpino de Gran Bretaña en Calgary 1988. Así que decidió intentar convertirse en el primer británico en competir en salto de esquí olímpico.
Edwards hizo ese sueño realidad en Canadá. Y aunque terminó sus dos pruebas en último lugar, se ganó el nombre de Eddie el Águila y aún es famoso en todo el mundo.
Nagano 1998: el primer oro de Tara Lipinski
La patinadora artística estadounidense Tara Lipinski tenía solo 15 años cuando compitió en los Juegos de Nagano 1998, pero a pesar de su tan corta edad ya había ganado un Mundial en 1997. Sin embargo, antes de su programa largo en Nagano, era segunda y necesitaba firmar una actuación perfecta para subir a lo más alto del podio.
Así que intentó lo que nadie antes había hecho en el patinaje artístico femenino: una combinación triple loop/triple loop. Lo que siguió forma parte de la historia de los Juegos Olímpicos.