Tenis de Mesa

El tenis de mesa es un derivado del tenis sobre hierba que se practicaba inicialmente como entretenimiento para después de la cena entre familias inglesas de clase alta: utilizaban como equipamiento cualquier objeto a mano que encontraban. En aquella época, colocaban libros sobre una mesa para que sirvieran de red, las tapas de las cajas de puros como raquetas y un corcho redondeado de una botella de champán como pelota. Afortunadamente, el equipamiento del tenis de mesa ha evolucionado con el tiempo y en 1926 se organizaron competiciones en Berlín y Londres, dando lugar a los primeros campeonatos mundiales, que se celebraron en la capital inglesa en ese mismo año. Con una enorme popularidad en Asia, el tenis de mesa es practicado por más de 40 millones de personas en todo el planeta, lo que lo convierte en uno de los deportes más populares del mundo.

El tenis de mesa se juega en una tabla dividida en dos mitades por una red en el centro, con una pelota extremadamente ligera y unas sofisticadas raquetas o ‘palas’, compuestas por una hoja de madera recubierta por una superficie de goma en ambas caras.

Los partidos individuales se disputan al mejor de siete juegos. El primer jugador que consiga 11 puntos (con un margen de dos tantos de diferencia) gana cada juego. Los partidos por equipos consisten de cuatro duelos individuales y un encuentro de dobles, cada uno de ellos al mejor de cinco juegos. Cada equipo está formado por tres jugadores y los partidos terminan cuando un conjunto gana tres duelos individuales. En los encuentros de dobles, los jugadores se turnan para golpear la pelota.

El tenis de mesa apareció por primera vez en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988, con competiciones individuales y de dobles para hombres y mujeres. En 2008, la competición de dobles fue sustituida por la de equipos. El programa se amplió para los Juegos de Tokio 2020, con la inclusión de dobles mixtos, lo que elevó a cinco el número total de eventos, repartidos equitativamente entre ambos géneros.

Hasta mediados del siglo XX, este deporte estaba dominado por países centroeuropeos como Hungría, la República Checa, Austria y Alemania. Sin embargo, desde que el tenis de mesa pasó a formar parte del programa olímpico de Seúl 1988, los atletas que representan a la República Popular de China han prevalecido y han ganado un total de 60 medallas (32 de ellas de oro) en los Juegos.