Stefanos Tsitsipas, en exclusiva: "Trato de ser diferente en mi manera de vivir"

Stefanos Tsitsipas tiene una filosofía de vida única.

A pesar de pasar la mayor parte del tiempo en el gimnasio o en la pista de tenis, el dos veces finalista de Grand Slams nunca deja de ver la belleza y el arte en cualquier situación.

Esta creatividad se refleja en su estilo de juego, casi poético, que combina potentes golpes de fondo y hábiles dejadas con un elegante revés a una mano.

Es un estilo que también tiene garra. Desde que se hizo profesional en 2016, el tenista de 26 años ha alcanzado el número 3 del ranking mundial y ha llegado a las finales del Abierto de Australia y del Abierto de Francia, perdidas ante Novak Djokovic en ambas ocasiones.

“El arte siempre me ha parecido lo mío. Y también tiendo a creer que el arte se puede encontrar en las palabras y en el discurso. Creo que mi punto de vista viene de mi padre y también probablemente de mis raíces griegas. Creo que todo está correlacionado y conectado”, aseguró a Olympics.com en la Casa Adidas durante los Juegos Olímpicos de París 2024.

“Intento seguir mi vida a través de cualquier cosa artística, ya sea desde la fotografía o en una charla. Intento ser diferente en mi enfoque de la vida. En realidad no lo fuerzo, pero encuentro la belleza en eso mucho más de lo que supongo que lo hacen otras personas”.

El origen de la mirada filosófica de Stefanos Tsitsipas

De Aristóteles a Sócrates, no falta inspiración filosófica en la patria de Tsitsipas.

En sus años de formación, el ateniense se sumergió en ella.

“Solía leer mucho. Me interesan mucho la filosofía y las nuevas enseñanzas. Siempre he tenido la mente muy abierta para aprender sobre diferentes tipos de temas. Así que creo que mi amplitud de miradas me ha ayudado a labrarme un camino de exploración y apertura a mí mismo”.

Como orgulloso griego, es razonable que Tsitsipas sienta una afinidad especial por los Juegos Olímpicos.

En primer lugar, los primeros Juegos de la era moderna se celebraron en su ciudad natal, Atenas. En segundo lugar, el abuelo materno de Tsitsipas, Sergei Salnikov, ganó la medalla de oro olímpica con el equipo soviético de fútbol en Melbourne 1956.

Deseoso de añadir otra medalla a la colección familiar, el prodigio del tenis se convirtió en el primer griego en ganar un partido individual en los Juegos Olímpicos desde Augustos Zerlandis en 1924, antes de caer eliminado en tercera ronda en Tokio 2020.

Decidido a mejorar ese resultado en París 2024, Tsitsipas llegó hasta cuartos de final, donde fue derrotado de nuevo por Djokovic, que acabaría ganando el oro.

“No tener una medalla este año me deja el corazón roto porque era mi objetivo y estuve muy cerca. Mi sueño sigue vivo, y todavía tengo esperanzas para el futuro, pero significa un poco más para mí que soy de Grecia y los Juegos Olímpicos significan mucho para nosotros”, continuó.

El dobles con su hermano Petros

Sin embargo, Tsitsipas pudo disfrutar de otro momento de orgullo en la capital francesa al competir junto a su hermano Petros en el dobles masculino. A pesar de su eliminación en primera ronda, es un momento que ambos hermanos aprecian.

“Roland Garros fue el primer lugar donde logré un gran éxito, así que me sentí muy ligado a la experiencia olímpica de este año. Me dejó un montón de buenos recuerdos y cosas sobre las que puedo reflexionar y sentirme orgulloso. Jugar con Petros fue un sueño hecho realidad para nosotros porque ambos habíamos buscado ese momento durante muchos años”, reflexionó.

Grecia no es famosa por producir estrellas del tenis en abundancia.

Como resultado, Tsitsipas, cuyo padre Apostolos le enseñó el juego, es consciente del impacto positivo que su éxito está teniendo en el deporte en su país.

En 2019, fue nombrado Atleta Masculino Griego del Año y está dispuesto a seguir inspirando a más niños para que se inicien en este deporte.

“Competir por Grecia en los Juegos Olímpicos me acercó a mi nación, a mi país y a mi gente que ha venido a apoyarme y me ha dado tanto en los últimos años”, afirmó.

“Sé que el tenis no es quizá el deporte más popular en mi país, pero ha cambiado en los últimos años. Por eso, significaría mucho para mí poder traer una medalla a casa en el futuro”.

La pasión por el baloncesto y Giannis Antetokounmpo

Ganar terreno en el competitivo mercado deportivo griego no es poca cosa.

Giannis Antetokounmpo, estrella de la NBA, es otro de los deportistas de la nación europea que ha arrasado en todo el mundo y que también compitió en París 2024.

El baloncesto goza de una gran popularidad en el país, y el “fenómeno griego” (Greak Freak) se convirtió en un icono nacional tras consagrarse como uno de los mejores jugadores del mundo.

Tsitsipas también es un gran admirador de la estrella de Milwaukee Bucks y se considera un súper fan.

“He visto todos y cada uno de los partidos que ha jugado en los Juegos Olímpicos. Le sigo y soy un seguidor apasionado. Grito, lloro, río, paso por todas las emociones que se pueden pasar en un partido de baloncesto”, dijo Tsitsipas.

“Mi pasión por el baloncesto es grande. Y especialmente cuando se trata de la selección griega de baloncesto, soy un gran seguidor”, reconoció.

Stefanos Tsitsipas y la superación

En cuanto a su propia carrera, Tsitspias quiere seguir el ejemplo de su compatriota jugador de baloncesto y alcanzar su máximo potencial.

Si lo consigue, es muy probable que también alcance el número 1 del mundo.

“Mi filosofía de vida es que quiero intentar mejorar cada día en cualquier aspecto que pueda”, subrayó.

“Por supuesto, el tenis sigue siendo una parte importante de mi vida, porque he hecho muchos sacrificios por él. Solo espero que al final, cuando acabe con este deporte, pueda decir que realmente lo he hecho todo para cumplir mis sueños”.

Aunque el tenis significa mucho para él, también está seguro de que el deporte es solo una parte de su vida.

Tsitsipas quiere ser recordado sobre todo como alguien que inspiró y ayudó a los demás.

“Realmente quiero vivir una vida humilde y noble. Y quiero vivir una vida en la que sienta que otras personas han sido apoyadas por mí y han recibido ayuda siempre que la han necesitado”.