Voleibol

La creación del voleibol se le atribuyó en 1895 y en Holyoke, Massachusetts, a William G. Morgan, director de educación física de YMCA y estudiante del Springfield College.

Mintonette (como se llamaba al voleibol en aquella época) fue diseñado para ser un pasatiempo de interior que pudieran disfrutar los miembros mayores de la YMCA y tomó algunas de sus características de otros deportes, como el tenis y el balonmano.

El voleibol se popularizó muy pronto y se desarrolló rápidamente en otros países a principios del siglo XX. Primero en Canadá y luego en Cuba y Japón. Los reglamentos iniciales de este deporte se elaboraron a principios del siglo XX y la primera federación internacional (Fédération Internationale de Volleyball, FIVB) se creó en 1947. Los primeros campeonatos mundiales masculinos se celebraron al año siguiente, mientras que la competición femenina se estrenó en 1952.

El voleibol lo juegan dos equipos de seis jugadores en una pista cubierta de 18m de largo y 9m de ancho. Los partidos se disputan al mejor de cinco sets. Se anota un punto cuando el balón cae dentro de los límites de la pista o cuando se comete un error de juego. El primer equipo que anota 25 puntos por un margen de dos puntos, gana el set. Si es necesario, se juega un quinto set a 15 puntos (en el que también se exige un margen de dos puntos de diferencia para el ganador).

En un partido de voleibol, el balón puede alcanzar velocidades de hasta 130 km/h, especialmente tras un espectacular servicio en alto o un smash. Por lo tanto, los atletas necesitan una gran fuerza y reflejos fulgurantes para bloquear esos tiros.

El voleibol hizo su debut olímpico en los Juegos de Tokio 1964. En las competiciones femeninas y masculinas se utilizó un formato en el que todos los equipos integraban el mismo grupo y se enfrentaban contra cada uno de los rivales de la zona. Ese sistema se mantuvo hasta los Juegos Olímpicos de Múnich 1972; el formato cambió a una ronda de grupos y una ronda eliminatoria de cuartos de final, semifinales y final para determinar así las medallas.

Los equipos de la Unión Soviética y Cuba subieron con regularidad al podio olímpico durante la década de 1980, al igual que sucedió con Italia y la República Popular de China en la década de 1990 y con Brasil, en la década de 2000. La antigua Unión Soviética, Brasil y Estados Unidos encabezan el medallero olímpico del voleibol y son los tres únicos comités olímpicos nacionales con al menos diez medallas cada uno.