Halterofilia

La halterofilia -conocida a menudo como halterofilia olímpica- existe desde hace miles de años y el objetivo todavía es el mismo: gana el atleta que levanta más peso. Los orígenes de este deporte se remontan al antiguo Egipto y a Grecia, donde la gente levantaba pesadas piedras en competiciones de fuerza. La halterofilia resurgió en el siglo XIX, cuando se celebraron los primeros Campeonatos del Mundo de Halterofilia, en 1891.

El programa olímpico de halterofilia ha evolucionado mucho con el paso del tiempo. Desde los Juegos de Montreal 1976 se realizan dos levantamientos en la competición: arrancada y envión. En la arrancada, la barra se eleva desde el suelo hasta por encima de la cabeza en un solo movimiento. En cambio, en el envión, la barra primero se eleva hasta los hombros y luego se levanta por encima de la cabeza. Estos ejercicios extremadamente exigentes requieren una fuerza física excepcional y una férrea determinación mental.

En la actualidad, los competidores realizan ambos levantamientos tres veces y su mejor resultado en cada levantamiento se combina para determinar su puntuación total. El atleta con la puntuación total más alta es declarado ganador. Hombres y mujeres competirán en cinco categorías de peso en los Juegos Olímpicos de París 2024.

La halterofilia formó parte de los primeros Juegos Olímpicos modernos, celebrados en Atenas en 1896. Excluida del programa olímpico durante algunas ediciones (1900, 1908 y 1912), se reintrodujo en los Juegos de Amberes 1920 y se ha mantenido presente desde entonces. En los Juegos de Sídney 2000 se celebró por primera vez una competición femenina.

A principios del siglo XX, los comités olímpicos nacionales (NOC) europeos -en particular Alemania, Austria y Francia- dominaban la halterofilia. A partir de la década de 1950, los atletas soviéticos encabezaron el podio hasta la década de 1990, cuando los representantes de la República Popular de China, Turquía, Grecia y la República Islámica de Irán comenzaron a ganar la mayoría de las medallas. China domina la categoría femenina desde que se introdujo como deporte olímpico oficial, en el 2000.