Las primeras bicicletas se inventaron en la década de 1850 y tenían un aspecto muy diferente al de las bicicletas que conocemos en la actualidad. No fue hasta la década de 1870 cuando se organizaron las primeras competiciones de ciclismo en pista cubierta sobre superficie de madera. La primera carrera de seis días se celebró en Londres en 1878. El ciclismo en pista se popularizó rápidamente y continuó con su desarrollo gracias a la creación de la Asociación Ciclista Internacional en 1892 y la organización del primer campeonato del mundo en Chicago, en 1893.
Breve resumen de las reglas
El ciclismo en pista se disputa en un estadio de 250 metros en forma de cuenco, conocido como velódromo, y cuenta con eventos de diferentes formatos de carreras individuales y por equipos. Las bicicletas de pista se diferencian de las de ruta en que son de piñón fijo y no tienen frenos.
En pista se disputan varios tipos de carreras, cada una con sus propias reglas y técnicas específicas. Algunas se basan más en la táctica, mientras que otras favorecen la fuerza y la potencia; por ejemplo, el esfuerzo necesario para completar una vuelta en el evento de velocidad individual es muy diferente del que se requiere en la carrera omnium de 25km totales.
Historia olímpica
El ciclismo en pista, disciplina olímpica de larga tradición, ha estado presente en todas las ediciones de los Juegos Olímpicos modernos, con la excepción de Estocolmo 1912. Las mujeres compitieron por primera vez en los eventos en pista en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988.
A lo largo de los 120 años de historia de este deporte, las naciones europeas -en particular Gran Bretaña, Francia, Países Bajos e Italia- se han llevado la mayoría de las medallas de los Juegos.