Osmar Olvera: "Estoy convencido de que lograré ser el mejor clavadista de México en la historia"
Con dos medallas en los clavados de los Juegos Olímpicos de París 2024, el joven mexicano ha descubierto la "responsabilidad social" de su éxito. Descubre en esta entrevista con Olympics.com qué supone para él haber hecho historia y cómo ve su futuro.
Saltos
Osmar Olvera fue el miembro más joven de la delegación de México en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, celebrados en 2021 a causa de la pandemia por el COVID-19; tres años después, en París 2024, se convirtió en el rey de los clavados y en el atleta con más medalla de entre los mexicanos en la capital francesa.
Con solo 20 años, Olvera logró la medalla de bronce en trampolín de 3 metros individual y la medalla de plata en el evento sincronizado junto a Juan Celaya, a solo 2.07 puntos del oro y en una prueba en la que nunca una dupla mexicana había conseguido subir al podio.
Con sus dos medallas olímpicas en París 2024, Olvera fue el segundo clavadista mexicano en la historia en lograr dos medallas en una misma edición de los Juegos, solo por detrás del considerado como mejor clavadista mexicano de la historia, Joaquín Padilla, quien hizo lo propio en Melbourne 1956.
Olvera tomó su porción de historia en París 2024, pero ya sabía lo que era ganar en grandes escenarios como Mundiales -es el vigente campeón del mundo en trampolín de 1 metro- o en los Juegos Panamericanos, donde ganó tres oros en Santiago 2023.
Pero triunfar en el escenario olímpico ha tenido un impacto aún más grande para él. "Aún estoy aprendiendo a cómo llevar esto, todo lo que viene después de ganar dos medallas olímpicas. Es un cambio total, pero lo estoy disfrutando", cuenta para Olympics.com.
Dicho así parece algo común. Si pone ejemplos, vuelve a aflorar su juventud en esa sonrisa tímida que cautivó a la porra mexicana.
"Voy a la tienda y me reconocen. Nunca creí que eso pasara. Me imaginé que obviamente más gente me iba a reconocer, pero no creí que hasta yendo al súper con mi mamá me fueran a pedir una foto", reconoce.
"Si nos ponemos algún límite, ya estamos perdiendo" - Osmar Olvera
Osmar Olvera, con la medalla de oro olímpica en mente
Los aficionados no se han olvidado del éxito de Olvera en los pasados Juegos Olímpicos, pero también él recuerda su recorrido en París 2024 de manera "muy clara".
"Todavía recuerdo cada clavado, cómo viví el día completo: todavía me enojo con algunos clavados porque los pude haber hecho mejor, pero es un recuerdo muy bonito. Las dos competencias fueron un sueño", rememora el joven clavadista de 20 años.
Entre estos clavados que recuerda con tanta vividez se encuentran especialmente los del evento sincronizado junto a Juan Celaya, donde se quedaron a solo 2.07 puntos de la medalla de oro.
"La verdad que todavía veo la competencia y, no voy a mentir, es un poco como frustración porque por nada no se nos dio esa medalla de oro. Pero es un súper logro: no cualquiera gana una medalla olímpica", recuerda Olvera.
Esa frustración le ha hecho llevar el objetivo del oro a los próximos Juegos Olímpicos de LA28.
"Creo que por algo pasan las cosas y que así tenía que ser", dice refiriéndose a la plata. "Estoy seguro que en Los Ángeles vamos a ganar la medalla de oro porque vamos a seguir trabajando Juan y yo. No tengo la menor duda de que por algo fue así y que en Los Ángeles tendremos nuestra revancha", sentencia.
"Desde que acabamos en París, ya estábamos pensando en lo que seguía", remarca Olvera, refiriéndose no solo a él, sino a todo su equipo de trabajo.
Y más allá.
El clavadista de Ciudad de México vaticina éxitos mexicanos en Los Ángeles 2028.
"París fue especial no solo para los que ganamos, sino para todos. Todos aprendieron, todos se llevaron cosas buenas de París. Y creo que en Los Ángeles va a ser aún mejor", empieza a esgrimir.
"Creo que todos esos compañeros que se quedaron a muy pocos puntos de lograr el sueño de poder subirse al podio olímpico van a trabajar el doble y en Los Ángeles lo van a lograr; y todos los que lo logramos vamos a querer volver a repetir. Entonces creo que van a ser unos Juegos Olímpicos, los de Los Ángeles, sumamente especiales".
Osmar Olvera y sus dos medallas olímpicas: El peso social
Aunque con la mente ya puesta en los que serían sus terceros Juegos Olímpicos, el niño que se colaba en las albercas de la familia sigue mirando hacia atrás a sus medallas de París 2024 de vez en cuando.
"Hay veces que me dan ganas de verlas, de sentir de nuevo cuánto pesan", reconoce.
Sin embargo, el peso verdadero de las medallas olímpicas es más social.
"Al ganar una medalla olímpica te cargas de una responsabilidad extra porque ahora te ve más gente, eres inspiración para para niños, niñas, jóvenes... Tienes que darles un buen ejemplo, tienen que tener un buen referente. Sin duda es algo que viene extra al ser un medallista olímpico", reflexiona Olvera.
"Entonces sí, tienes esa responsabilidad extra que para mí no ha sido difícil de entender: creo que siempre he sido esa persona que quiere inspirar a los demás, que quiere ser un ejemplo para esos niños y niñas, no solo de México, sino de todo el mundo. Si puedo inspirarlos, yo encantado".
¿Podrá superar Osmar Olvera a Joaquín Capilla y ser el mayor clavadista de la historia de México?
En sus segundos Juegos Olímpicos, Olvera consiguió tomar el relevo de Joaquín Capilla en convertirse en el segundo clavadista mexicano en lograr dos medallas en una misma edición olímpica. Capilla lo hizo en Melbourne 1956, casi medio siglo antes de que Olvera naciera.
Capilla sigue considerándose el mayor clavadista de la historia de México por las cuatro preseas olímpicas que logró en su trayectoria: bronce en Londres 1948, plata en el Helsinki 1952 y oro y bronce en Melbourne 1956.
Sin embargo, Olvera ya ha logrado la mitad de ellas con solo 20 años.
Su potencial dice que sí, que Olvera puede superar a Capilla. Pero la pregunta tenía que llegar: ¿Crees que serás el mayor clavadista de la historia de México?
"Es algo muy fuerte, pero sí es un sueño que tengo. Todavía me faltan dos medallas para poder alcanzar a Joaquín Capilla. Pero yo creo que sí lo puedo hacer. Estoy convencido de que lo voy a lograr y de que lo puedo hacer. Sin duda trabajaré muy duro para hacerlo. Es el sueño que tengo y no descansaré hasta lograrlo. Todavía me quedan tres ciclos para igualarlo y superarlo, entonces creo que tengo bastante tiempo", reflexiona, con coherencia y con la timidez que le caracteriza.
Para llegar a Los Ángeles 2028, primero tiene que afrontar el post-París 2024. La temporada 2025 cuenta con una gran competencia en el calendario: el Mundial de Deportes Acuáticos 2025 en Singapur, del 11 de julio al 3 de agosto.
"Lo que más deseo [en 2025] es ser campeón mundial en trampolín de tres metros. Ese va a ser el objetivo. Y obviamente volver a repetir en el trampolín de un metro esa medalla de oro", aspira Olvera.
Su ambición no riñe con su timidez ni juventud. Sabe lo que puede lograr porque también conoce su trabajo.
Por ello, ¿Osmar Olvera tiene algún límite?
"No. El límite es el cielo. Los límites nos los ponemos nosotros mismos en nuestra cabeza. Si nos ponemos algún límite, ya estamos perdiendo. Entonces, creo que no hay que ponernos límites. Hay que soñar en grande y luchar por eso que soñamos".