Crecer sin una identidad y sufrir diariamente solo por sobrevivir es el origen de la historia de la superestrella del baloncesto Giannis Antetokounmpo.
Sus padres, Charles and Veronica Antetokounmpo, emigraron de Nigeria a Grecia. Su estatus de inmigrantes les dificultó encontrar trabajos estables y, sin eso, no podían convertirse en ciudadanos griegos.
Su situación les llevó a la pobreza. Conseguir dinero y comida para la familia se convirtió en su meta común.
En una entrevista con ESPN, Giannis Antetokounmpo reflexionó sobre su infancia: "Solía vender cosas desde que tenía seis o siete años".
"Siempre estaba fuera de casa intentando ayudar lo más que podía a mi madre y a mi padre vendiendo relojes, gafas, CDs, DVDs y todo lo que podía encontrar. Hice eso hasta los 17 porque era lo que tenía que hacer. No tenía otra opción. Cuando vendía, era el mejor".
"Mi secreto era no rendirme nunca. Seguía preguntando a la gente hasta que les convencía de comprar algo. También ayudaba que era joven y adorable".
Al vivir rodeado por una extrema pobreza, Antetokounmpo creció pensando que no tenía nada que perder, así que hizo todo lo que pudo para llevar dinero a su familia.
Él dormía en la misma cama que sus hermanos, Thanasis, Alex, y Kostas, ya que la familia no podía asumir comprar una casa más grande con más habitaciones.
Durante los años en los que vivió allá, siempre tuvo miedo de que les echaran de su casa porque a veces no tenían dinero suficiente para pagar el alquiler.
Giannis Antetokounmpo: su elección entre fútbol y baloncesto
Antetokounmpo quería ser jugador de fútbol como su padre.
Así que, cuando su entrenador, Vasilis Xenakis, intentó meterle en el equipo de baloncesto, Antetokounmpo no tuvo ningún interés en jugar con ellos. No tenía experiencia y no era su deporte soñado. Lo mismo pasó con sus hermanos.
Para poder convencerle, el entrenador griego le ofreció la posibilidad de ganar dinero: "Le dije que si probaba suerte en el baloncesto, podría hacer algo de dinero para comprar comida".
El entrenador también le prometió que, si no prosperaba en baloncesto, le encontraría un equipo de fútbol. Pero pronto los dos entendieron que Antetokounmpo iba a brillar en las pistas de baloncesto.
Cuando los hermanos Antetokounmpo comenzaron a jugar a baloncesto, hubo partidos en los que no podían jugar a la vez porque tenían que compartir entre ellos el mismo par de zapatillas.
Cuando Giannis salía de la pista, le daba las zapatillas a su hermano Thanasis para que él pudiera entrar, y viceversa.
Años después Giannis contó detalles sobre esta época para ESPN: "Aquellos momentos eran preciosos. Pasar por ese sufrimiento y salir adelante y ver a tu familia hacerlo también es increíble. Recuerdo aquellos momentos y estoy feliz de haber pasado por ahí".
"Puede que no tuviéramos mucho dinero, pero al menos éramos felices. Cuando teníamos problemas, nos juntábamos en la misma habitación y lo pasábamos bien, a pesar de las dificultades que estuviéramos afrontando. Y eso sin duda nos hizo más fuertes".
Giannis Antetokounmpo: una inspiración para las generaciones futuras
Ahora Antetokounmpo es uno de los mejores jugadores de la historia.
En el draft de la NBA de 2013, el jugador conocido como el 'Greek Freak' se ha convertido en ganador de un título de la NBA con los Milwaukee Bucks (2021), además de acumular una lista premios individuales que incluyen ser dos veces MVP de la liga y MVP de las finales.
Además, forma parte de la selección de Grecia durante los partidos de clasificación a la Copa del Mundo de la FIBA 2023, y podría representar a su nación en los Juegos Olímpicos de París 2024.
La historia de las raíces de Antetokounmpo está considerada como una fuente de inspiración.
Todos los que admiran al jugador de baloncesto pueden ver que, a pesar de sufrir las peores adversidades, todavía hay esperanza, y los sueños se hacen realidad cuando no te rindes y luchas duro por ellos.
Giannis y sus hermanos abrieron el pasado año su fundación, la AntetokounBros Academy, para ayudar a comunidades como la de él y su familia.
La fundación, que ponen un énfasis especial en Grecia y África, ayuda a los niños ofreciéndoles oportunidades que los hermanos no tuvieron en su infancia.