Willy HERNANGOMEZ

El padre, Guillermo Hernangómez, también hizo carrera como pívot a nivel profesional. Creció en la cantera del Real Madrid y compitió durante un año con el primer equipo. Ambos se retiraron en 1993, antes de comenzar su etapa como padres.

Un año más tarde nació el mediano de los hermanos, Juancho, quien juega en la misma posición que su hermano mayor, la de pívot en los Denver Nuggets de la NBA desde el 2016; competición en la que ya se han enfrentado en varias ocasiones.

Los hermanos no están solos en su aventura por Estados Unidos. La pequeña de la estirpe Hernangómez - Geue, Andrea, juega desde el 2018 en la liga universitaria NCAA para la universidad de Fairfield de Connecticut. La joven sigue los pasos de sus hermanos y también aspira a convertirse en una estrella del baloncesto.

Sin embargo, a los hermanos Hernangómez, el baloncesto no les entusiasmaba de pequeños, les gustaba más el fútbol, deporte que tampoco se les daba mal.

Ambos hermanos comenzaron jugando al baloncesto en su localidad natal, en el Club de Baloncesto Las Rozas, y aunque se iniciaron algo tarde en el deporte, Willy fuen quien comenzó a destacar muy rápido. Motivo que le bastó a la cantera del Real Madrid para fijarse en él e incorporarlo a sus filas.

En el 2008, Willy Hernangómez ya era jugador del Real Madrid, demostrando un gran control del juego pese a llevar poco tiempo entrenando. El club blanco no tardó en ascenderlo al Cadete A, equipo con el que hizo su debut en la competición internacional.

Y como parecía que el progreso del joven Willy no tenía techo, la temporada 2012-2013 fue el año en el que hizo su debut como profesional con el Real Madrid. Jugó un total de seis partidos de Liga ACB y tres de Euroleague donde cumplió con su papel con creces.

Conscientes del potencial del jugador, el Real Madrid decidió que el Willy necesitaba contar con mas minutos para terminar de curtirse y formarse como profesional, por lo que decidieron cederlo un año al Cajasol, en la temporada 2013-2014.

Al final, jugó dos temporadas para el Cajasol sevillano, club que guarda un gran recuerdo del madrileño. Especialmente en la temporada 2014-2015, donde en la jornada 10 de la ACB frente a un todopoderoso Barcelona, Willy acabó siendo el mejor jugador con 29 puntos y 13 rebotes (43 de valoración). Siendo el jugador más joven en conseguir dicha cifra en la liga de baloncesto española.

La temporada siguiente regresó al Real Madrid, donde se proclamaron campeones de Liga ACB y la Copa del Rey. Y al finalizar la temporada, decide dar el salto a la NBA.

En junio de 2015 fue elegido en la segunda ronda del Draft de la NBA de 2015 en la posición 35 por Philadephia 76ers, que cedió sus derechos a los New York Knicks.

La carrera del madrileño en la máxima liga del baloncesto mundial fue de menos a más y la llegada no fue fácil. Los Knicks no estaban en su mejor momento y esto le repercutió. En su debut con el equipo de Nueva York, consiguió cuatro puntos, pero no fue suficiente para el club, por lo que decidieron bajarlo al filial de G-League, los Westchester Knicks. Aunque no llegó a jugar ningún partido con ellos, pues el club se arrepintió y volvieron a llamarlo para el Madison. Dos días después de este episodio, el jugador consiguió su season-high con 14 puntos, demostrando su potencial.

Acabó su primera temporada con 8,2 puntos de media. Números que le sirvieron para ser incluido en el mejor quinteto de rookies de la NBA.

Pero en su siguiente temporada los problemas volvieron. Willy comenzó a contar con muy pocos minutos de juego y el 7 de febrero de 2018 fue traspasado a los Charlotte Hornets a cambio de Johnny O´Bryant y dos segundas rondas del draft. Acabó esa temporada con una media de 6.1 puntos en el tramo que jugó con los Hornets.

En la temporada 2018-2019, el español consiguió 7.3 puntos de media, acercándose cada vez más a su mejor época con los Knicks, y asentándose poco a poco como jugador de la NBA.