Kelvin Kiptum: la vida del extraordinario plusmarquista mundial de maratón que terminó demasiado pronto
El keniano murió trágicamente en un accidente de tráfico a la edad de 24 años. La estrella del atletismo, que nunca dejó de entrenarse, esperaba batir su propio récord mundial en abril en Róterdam y ganar el oro olímpico en París 2024.
Increíble. Talentoso. Extraordinario. Superestrella. Ambicioso.
Éstas son solo algunas de las palabras que el mundo del deporte ha utilizado para describir al plusmarquista mundial de maratón, Kelvin Kiptum, cuya vida se truncó trágicamente el domingo 11 de febrero en un accidente de tráfico en la ciudad de Kapsabet, en el oeste de Kenia.
En solo tres maratones, Kiptum pasó de ser un prometedor atleta keniano a uno de los atletas más emocionantes en las carreras de larga distancia en carretera.
Su marca de 2 horas y 35 segundos en el maratón de Chicago 2023 hizo añicos el entonces récord mundial por 34 segundos.
En ese momento, el mundo se dio cuenta de su inusual talento.
Con esa carrera, se convirtió en el primer hombre en terminar un maratón en menos de dos horas y un minuto. Muchos empezaron a apostar por él como la próxima superestrella del maratón y se convirtió en el favorito indiscutible para el oro en los Juegos Olímpicos de París 2024.
Cuando falleció el domingo 11 de febrero, le faltaba solo una carrera para ese sueño. Kiptum debía correr el 14 de abril en el maratón de Róterdam, una carrera que podía haber afianzado aún más su rápido ascenso, ya que planeaba "mejorar su tiempo" en la ciudad holandesa.
Por desgracia, nunca llegaremos a ver todo su potencial. Ni veremos lo que podría haber sido una de las mejores carreras olímpicas de maratón: un duelo Kiptum vs. Kipchoge en la capital de Francia.
La rápida ascensión de Kelvin Kiptum a la gloria en Valencia y Londres
El de 2023 fue un año estupendo para Kiptum.
Su victoria en el Maratón de Londres en abril, lograda en un tiempo de 2 horas, 1 minuto y 23 segundos, fue entonces el segundo tiempo más rápido en la historia. Ese día, estuvo a solo 16 segundos de igualar el récord mundial de Eliud Kipchoge de 2022 en Berlín y se convirtió en el corredor más joven en completar un maratón en menos de 2:02:00.
Kiptum, que había protagonizado el debut en maratón más rápido de la historia (2:01:53) tan sólo cuatro meses antes, creía que podía correr aún más rápido.
"Sé que puedo correr en 2:00 o algo así", dijo a Olympics.com antes de irse a Chicago, donde correría su tercer y último maratón en octubre pasado.
"Es muy posible correr en 2:00. Puede que no sea ahora porque aún soy joven", continuó.
En 2019, cuando Kipchoge superó las barreras de las carreras de distancia al convertirse en el primer hombre en cubrir la distancia de 42,2 km en menos de dos horas, Kiptum ni siquiera había corrido un maratón completo.
El entonces corredor de medio maratón solo podía maravillarse ante la carrera de 1:59:40 de Kipchoge, no ratificada como récord mundial por las condiciones en las que se corrió.
Pero probar la gloria en Valencia en diciembre de 2022, cuando todavía era relativamente desconocido en el mundo del maratón, renovó su confianza en sus posibilidades para ser uno de los mejores.
"Valencia... fue el comienzo del viaje del maratón y estaba tan feliz. Mi objetivo en Valencia era correr en 2:04, 2:05... Luego, corrí en 2:01. Pero mirando hacia atrás antes de Valencia, había tenido algunos de mis mejores entrenamientos para el maratón con algunas buenas carreras largas", aseguró Kiptum.
Kelvin Kiptum, después de ganar el Maratón de Londres 2023 con la mejor marca de la prueba
Kelvin Kiptum: el hombre que nunca dejó de entrenarse
Esas largas carreras definieron la mayor parte de la vida de Kiptum.
Comenzó a correr por los caminos de tierra de su ciudad natal de Chepkorio, en Elgeyo Marakwet, cuando tenía unos 13 años. Como muchos niños que crecen en los famosos centros de corredores de Kenia, su mayor sueño era convertirse en atleta.
Kiptum creía que se convertiría en uno de los mejores talentos de una región que ya había dado otros grandes nombres, entre ellos, Geoffrey Kamworor, doble ganador del Maratón de Nueva York, con el que compartía pueblo.
El adolescente Kiptum trabajó incansablemente para forjar su propio camino.
"Cuando empecé a entrenarme, fue con los maratonistas y los corredores de carreras en carretera y, por eso, empecé a correr carreras en carretera tan joven. Tampoco había pistas donde me entreno", explicó a Olympics.com, reflexionando sobre su decisión de no correr en pista.
"No tenía dinero para viajar a Eldoret o ir al estadio Kipchoge Keino para hacer sesiones de pista", explicó.
Cuando solo tenía 18 años, ganó el medio maratón de Eldoret 2018 y, al año siguiente, terminó primero en otra carrera de 21 km en Francia.
"De hecho, en ese momento ya me estaba entrenando para el maratón, pero no tuve la oportunidad de correrlo. Me dije, ‘déjame esperar otros dos o tres años, luego corro el maratón’".
Kelvin Kiptum celebra su récord del mundo en el Maratón de Chicago.
Kiptum fue su propio entrenador durante años, antes de comenzar a trabajar con Gervais Hakizimana en 2021. El entrenador ruandés, que falleció con él en el accidente automovilístico, solía entrenar en la famosa región de gran altitud de Kenia, donde forjaron una amistad.
"Solía juguetear conmigo, mientras pastoreaba su ganado, cuando iba a entrenarme en las colinas cercanas a su casa. Me daba patadas en broma y, con el tiempo, comenzamos a correr juntos", contó Hakizimana, que representó a Ruanda en los Campeonatos Mundiales de Medio Maratón de 2008 y 2009.
Hakizimana también fue quien reveló el riguroso régimen de entrenamiento de Kiptum al mundo.
Los días de recuperación o descanso eran raros para el joven de 24 años, ya que todo lo que hacía era "correr, comer, dormir".
En una entrevista con AFP, el entrenador contó que Kiptum salía a correr largas distancias los lunes, miércoles, jueves, viernes y domingos. Los martes los dedicaba a sesiones de Fartlek en la pista.
Los jueves y domingos, Kiptum hacía 40 km, a ritmo de maratón. La única vez que se vio obligado a reducir la velocidad fue dos semanas antes del maratón de Chicago, cuando cayó enfermo. Al principio, consideró retirarse del maratón, pero, al final, su entrenador lo convenció para que corriera.
"Enfermó hace dos semanas, de repente, y se quedó débil. Lo que empeoró todo fue una amigdalitis aguda, que le hinchó el cuello. Tuve que manejar la situación y le dije que no podía dejar de competir en Chicago", recordó el fallecido Hakizimana en una confesión que hizo que el último gran logro de Kiptum fuera aún más espectacular.
Las expectativas de Kelvin Kiptum: "2024 será un buen año para mí"
En el maratón en el que Kiptum batió el récord mundial en Chicago, el keniano nunca pareció cansado. Estaba tranquilo y parecía fresco cuando cruzó la línea de meta del recorrido, en gran parte plano.
Nadie dudaba que podía haber corrido más rápido si alguien lo hubiera desafiado en los momentos finales de la carrera.
Y, habiendo establecido el tiempo más rápido en la historia en apenas su tercer maratón, el joven keniano decidió probarse a sí mismo en 2024 en las carreteras casi completamente llanas del Maratón de Róterdam.
En un año olímpico, parecía que Kiptum tendría casi infinitas oportunidades para brillar.
"Quiero regresar a Róterdam para correr rápido", dijo entusiasmado el atleta, en una conferencia de prensa en la que confirmó sus planes de maratón para 2024.
"Este recorrido plano se presta a tiempos rápidos... Intentaré, al menos, superar mi récord mundial aquí. Sé que soy capaz de hacerlo si mi preparación funciona bien y las condiciones están bien. Y en ese caso, me acercaré a la barrera de las dos horas, así que ¿por qué no apuntar a romperla? Puede parecer ambicioso, pero no tengo miedo de marcarme este tipo de metas. No hay límite para la energía humana".
Como siempre, Kiptum se mostró sereno y elocuente a la hora de compartir sus objetivos. El hombre que nunca dejó de entrenarse estaba claramente decidido a redefinir las posibilidades del maratón.
El otro punto de su lista de cosas por hacer era el maratón olímpico de París 2024, donde podría haber tenido la oportunidad de enfrentarse a su gran compatriota Kipchoge en una carrera para la historia.
"¡Creo que 2024 será un buen año para mí!", declaró. "Después de Róterdam, están los Juegos Olímpicos. Estaré feliz de competir en los Juegos Olímpicos y quizás de ganar el oro".
Trágicamente, la carrera y la vida de Kiptum terminaron demasiado pronto.
Sin embargo, sus palabras llenas de pasión seguirán inspirando a otros corredores para que aprovechen el momento y sigan persiguiendo el sueño de un maratón de menos de dos horas.