Ingrit Valencia: Los ojos de 'La Pantera' están fijados en los Juegos Olímpicos

Por Marta Martín
8 min|
Ingrit Valencia de Colombia en acción contra Aldana Lopez de Argentina durante los Juegos Panamericanos Santiago 2023
Foto por CHRISTIAN ZAPATA/SANTIAGO 2023 via PHOTOSPORT

La boxeadora colombiana Ingrit Valencia ya tiene una medalla olímpica, pero quiere repetirla en París 2024. En el camino de intentar llegar a los que serían sus terceros Juegos Olímpicos no todo han sido éxitos. En esta entrevista con Olympics.com, la púgil de Colombia cuenta la dureza de compaginar ser madre con 18 años mientras intentas cumplir tus sueños como boxeadora.

Los ojos de Ingrit Valencia casi parecen perforar a sus rivales. O incluso a los sacos cuando entrena. Son un golpe más, quizá el más duro, encima de un ring. Ella, dice, se parece a una pantera. Y su mirada lo atestigua.

Ahora sus pupilas están colisionando con un gran objetivo: los Juegos Olímpicos de París 2024. Si lograra llegar a ellos a través del Clasificatorio Olímpico Mundial que se disputa del 3 al 11 de marzo en Italia, serían los terceros Juegos para la púgil colombiana, que pelea en -50 kg.

"Sería una bendición, un orgullo y un sueño ya que serían mis terceros Juegos Olímpicos y es algo que creo que todo deportista desearía. Sé que lo voy a lograr", asegura Valencia para Olympics.com.

Ella no solo ha participado en dos ediciones, sino que además sabe lo que es ser subir al podio olímpico. Lo logró con un bronce en Río 2016. En Tokio 2020, que se disputó en 2021, se quedó a las puertas de repetir la hazaña, pero no lo sintió como una derrota. "Di todo mi amor por obtener esa medalla y bueno, me quedé con el diploma olímpico. Pero para mí no fue pérdida, sino experiencia", rememora.

Porque Ingrit Valencia sabe de sobra la diferencia que hay entre no ganar una medalla y lo que es realmente perder algo. Quedó embarazada joven, sufrió un desalojo en su casa tras los Juegos de Tokio 2020... Pero toda su vida ha abrazado las dificultades para salir más fuerte. Más pantera.

"Yo siempre he dicho que Dios les pone sus mejores guerras a sus mejores guerreros. Yo pasé por cosas difíciles, pero he logrado salir adelante por el apoyo de muchas personas que me han colaborado y obviamente por el deporte. El boxeo ha sido como mi salida, me ha abierto muchas puertas", se reafirma.

Descubre a continuación la vida de Ingrit Valencia contada por ella misma y cómo se ha repuesto a los golpes fuera del ring.

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El poder de la fuerza mental

A la hora de encarar los combates, Ingrit Valencia los afronta primero con la mente. Esa fortaleza psicológica es casi como una gota que cae de la cabeza a los ojos y de los ojos a los guantes: empapa todo.

"Yo visualizo mis rivales, siempre estoy como pensando positivamente. Los pensamientos son muy importantes. Si piensas negativamente y te subes al ring perdiendo, vas a perder. Yo trato de obviar esos pensamientos y siempre concentrarme en algo positivo", explica.

"La fuerza mental tiene muchísima importancia en boxeo. Si no estás concentrado 100% o enfocado a lo que quieres, difícilmente llegas. Es muy importante tener una parte psicológica muy adecuada, tanto en la competencia, como en la vida diaria".

Quizá la fuerza mental es lo que más asemeja a la Ingrit Valencia del ring con la que está fuera de él. Sin embargo, según la colombiana son casi dos personas diferentes.

"Siempre he dicho que tengo dos personalidades distintas porque en el ring soy una persona seria, me siento ruda a la hora de enfrentar un combate, pero abajo soy totalmente diferente: soy muy feliz, me mantengo sonriendo todo el tiempo, me gusta bailar, me maquillo y disfruto cada momento de la vida porque a eso vinimos a este mundo: a disfrutar y a vivirla", empieza a explicar.

Pero con el sonido de la campana le cambia la mirada. En ese momento es cuando, al subirse al cuadrilátero y agacharse entre cuerda y cuerda para poner el primer pie en él, Ingrit Valencia se convierte no solo en púgil, sino en pantera.

"Como boxeadora me defino como una mujer inteligente, rápida y sigilosa. Me gusta mucho un animal que es la pantera. Fuera del ring, en cambio, soy una mujer muy resiliente y alegre y trato de transmitir todo lo que he vivido a mi vida real y transmitírselo a mis familiares, a mi hijo, especialmente a conseguir lo que quiera, pero haciéndolo de una mejor manera".

Ser madre con 18 años y boxeadora olímpica

Ingrit Valencia aspira a que su hijo consiga lo que quiera, al igual que hizo ella: sin rendirse ni dejar de lado sus sueños. En su caso, lo hizo a pesar de quedar embarazada con 18 años de su hijo Jhojan. Y compaginar la maternidad con el boxeo no fue un camino sencillo.

"Jhojan es mi fan número uno. Siempre ha sido una inversión de tiempo, porque no lo llamo sacrificio. Y fue una inversión de los dos, de él para mí también. Desde muy niño lo empecé a dejar por mis viajes, por mis concentraciones. Ha sido una crianza intermitente, pero he estado muy pendiente y le he enseñado cómo se consiguen las cosas en la vida. Hay que hacer muchos sacrificios, muchas inversiones de tiempo, pero al final hay un buen resultado y eso me ha dado que se pueda formar bien en el deporte y académicamente tener una mejor vida", cuenta Valencia.

Hubo momentos en los que el boxeo parecía ser un obstáculo para esta crianza intermitente, como la llama ella. La púgil colombiana llegó incluso a replantearse si el ring le estaba quitando más de lo que le estaba dando. Y, ante eso, su prioridad era clara.

"Es muy difícil ser madre y ser atleta a la vez porque tienes que estar de tiempo entero como mamá o el tiempo entero como atleta. Si no lo haces, no te va a salir bien. A mí me costó muchísimo, pero al final lo logré. Fue duro para mí que me llamaran de la escuela siempre a decirme que Jhojan no hacía tareas, que Jhojan era desobediente, que Jhojan era indisciplinado... Y de repente le llevé al psicólogo y me dijeron que él hacía eso por llamar mi atención por mi ausencia", prosigue Valencia, recordando la infancia de Jhojan, que ahora tiene 17 años.

"Muchas veces intenté retirarme del deporte por ayudar a mi hijo, pero muchas personas me decían que no abandonara mi sueño. Y entre los dos pudimos salir adelante. Fuimos mano a mano. Hoy en día ya mi hijo tiene 17 años, y es muy feliz. Es mi fan número uno, está orgulloso de su mamá y yo muy feliz de tener a mi hijo y haber podido lograr mis sueños siendo mamá, que no es nada fácil".

Cuando Ingrit Valencia entendió que sus sueños como boxeadora y su papel de madre no colisionaban, pudo dar ejemplo de que, aunque el camino no sea fácil, es posible. Y de la importancia de luchar por los sueños incluso teniendo a otra persona como prioridad sobre la propia.

"[Lo que he vivido] me sirve para dar consejos a muchas chicas que como yo, que fueron mamás muy jóvenes y que quizás tienen sueños de salir adelante y se frustran porque son mamás y dicen que no pueden o se les meten en la cabeza que no. Yo creo que todo está en la mente de uno y en querer hacer las cosas", remarca.

Ingrit Valencia ayudándose a sí misma, también inspira a otras mujeres. Pero ella también tuvo otra mujer en la que mirarse durante toda su vida: su abuela.

"Siempre tuve un referente que no fue atleta ni conoció el mundo del deporte. La primera persona que me inspiró a salir adelante, a ser una guerrera, fue mi abuela. Era una mujer que cargaba ollas grandes, después de bajarlas del fogón, para repartirlas a los trabajadores. Para mí eso era de admirar. Ella era una guerrera y me enseñó a cómo se ganaba uno la vida luchándola, sin conseguir nada de manera fácil. Me decía que todo en la vida es difícil, pero al final siempre puede haber un buen resultado", recuerda Valencia.

Su hijo es su fan número uno, pero, si su abuela le viera ahora, ¿qué pensaría de la pantera que hay dentro y fuera del ring?

"Sería la mujer más orgullosa y me encantaría que estuviera viva porque se pondría muy contenta de verme triunfar, de ver que seguí su consejo y que nunca me rendí".

Dónde ver a Ingrit Valencia en vivo en el Clasificatorio Olímpico Mundial de Boxeo 2024

El Torneo Clasificatorio Olímpico Mundial de Boxeo en Italia tendrá lugar del 3 al 11 de marzo de 2024.

Los últimos días de competición, incluidos los cuartos de final donde se repartirán la mayor parte de las cuotas olímpicas a París 2024 en boxeo en el primer torneo clasificatorio mundial, se podrán ver en vivo a través de Olympic Channel, vía Olympics.com, y nuestra app para dispositivos móviles.