Carmen Martín: "Es increíble el espíritu de equipo, las ganas y la fuerza que los Juegos Olímpicos te dan simplemente por estar ahí"

Es una leyenda dentro del 40x20, y todavía le queda carrera para rato. Carmen Martín es la cuarta jugadora con más internacionalidades con la selección española de balonmano femenino, y este fin de semana sumará otras dos: las de los enfrentamientos del Torneo de Clasificación Olímpica de Tokio 2020, que se disputa en Llíria (España) y que va a enfrentar a 'Las Guerras' con Argentina y Suecia.

Como capitana de la selección española, y después de haber disputado dos Juegos Olímpicos -y ganado un bronce-, Carmen Martín es consciente de la importancia de no confiarse en una cita así. Aunque España juegue en casa y llegue al torneo como favorita al ser la vigente subcampeona mundial, enfrente tendrá a dos selecciones de las que no bajan los brazos.

España se enfrentará primero a Suecia mañana, viernes, mientras que el sábado descansará y el domingo cerrará el Preolímpico ante Argentina. El motivo del descanso el sábado es que en principio Senegal iba a disputar el torneo, pero finalmente declinó su participación, según confirmó la IHF la semana pasada.

Así, Suecia, Argentina y España se disputarán dos billetes a Tokio 2020. Carmen Martín ha analizado en una entrevista para Tokio 2020 a sus rivales, pero no ha podido decir qué es ese algo que tienen los Juegos Olímpicos. Eso sí, algo está claro que tienen. "Yo creo que los Juegos te dan unas emociones y unas ganas de competir distintas", reconoce.

¿Qué expectativas tiene España en el Preolímpico?

Carmen Martín: El objetivo es claramente clasificarse para los Juegos Olímpicos. Ya son dos generaciones consecutivas que hemos podido clasificarnos y todas nosotras esperamos tener la oportunidad de hacerlo otra vez y poder realmente ir a esos Juegos de Tokio.

Veamos las selecciones rivales. ¿Cómo definiría a Suecia?

Suecia es un rival contra el que nos hemos enfrentado estos dos últimos años tanto en Europeos como en Mundiales. En el Mundial de Japón nos ganaron, pero en el último partido en el que nos enfrentamos en el Campeonato de Europa obtuvimos un empate, así que eso fue bastante positivo. Fue una muestra de que estamos mejorando. Es un rival muy duro y corre muchísimo. Físicamente, creo que es un rival superior a nosotras, pero considero que tenemos opciones de ganar.

¿Y a Argentina?

No recuerdo haber jugado partidos oficiales, pero sí muchos amistosos contra ellas. Y es un rival que siempre sale con todo, que tiene muchísima garra, que no se achanta en absoluto contra nadie. Por supuesto va a ser complicado superarles también.

Como subcampeona del mundo, ¿España es favorita en este torneo clasificatorio?

En absoluto, en absoluto. Sí que es cierto que hay que dar las gracias a nuestra Federación por tener la oportunidad de realizarlo en España: trabajar en España, estar concentradas desde el minuto 1 en el que llegamos a la concentración, no tener que hacer viajes no correspondientes para poder jugar esos partidos... es algo muy bueno para nosotras. Estoy feliz de que lo podamos hacer en España.

Es decir, el factor cancha tiene importancia pese a que haya restricciones de aforo.

Sí, yo creo que repercute. Al final lo estás jugando en un pabellón en el que entrenas diariamente, en el que tienes la opción de conocer, de situarte dentro de ese 40x20. Además, muchas de nosotras estamos viviendo fuera. Entonces tener la oportunidad de volver a España, de escuchar español, de vivir dentro de nuestra cultura... Simplemente eso creo que nos aporta un plus de felicidad que igual no tienen otras selecciones.

¿Qué supondría clasificar para Tokio 2020?

Tener la oportunidad de estar en otros Juegos Olímpicos sería felicidad máxima. Para muchas jugadoras, poder disputar sus primeros Juegos Olímpicos es una pasada. Te dan nada más que ganas de seguir trabajando y de continuar y y de llegar en las mejores condiciones posibles para para poder hacerlo lo mejor posible en los Juegos Olímpicos.

Habla de que para algunas serían sus primeros Juegos. En el último ciclo Olímpico especialmente, la selección española de balonmano se ha visto inmersa en un cambio generacional. Y de hecho, en este Preolímpico también habrá caras relativamente nuevas, como las de Lysa Tchaptchet o Irene Espínola. ¿Qué aportan estas jóvenes jugadoras a la selección?

Lo que aportan realmente es muchísimo trabajo, muchísima constancia, muchísima ilusión, ganas de aprender, felicidad alrededor. Creo que es un conjunto muy bonito, porque algunas tenemos un poco la experiencia y otras tienen esa ilusión de vestir la camiseta por la selección y esas ganas de entrenar cada día para mejorar como nosotras. Y eso lo transmiten. Nosotras, las que llevamos más años, podemos dar un poco de experiencia y de calma y de entendimiento hacia lo que lo que queremos dentro de la selección nacional.

Con cambio generacional incluido, España logró proclamarse subcampeona del mundo en el último Mundial (2019), que precisamente se disputó en Japón. Sin embargo, debido a una lesión personalmente tuvo que disfrutar del Mundial desde casa.

Evidentemente fue una felicidad máxima y estuve a tope con mis compañeras. Tuve un momento de pena por verlo desde la distancia, pero es cierto que al final tuvimos que tomar una decisión: no hubo más vuelta de hoja que tener que quedarme para continuar con mi rehabilitación y poder volver en unas condiciones óptimas al terreno de juego.

Después de aquel Mundial, España puede volver a Japón en otra gran competición internacional pero tras un 2020 que lo ha cambiado todo. ¿Cree que ha evolucionado también el significado de los Juegos Olímpicos tras la pandemia?

Sí que pienso que tienen ahora un matiz más humano. Creo que al final todos nos hemos como humanizado un poco más; a raíz de esta pandemia, estamos entendiendo un poco más que tenemos que ayudar al otro, que no sólo podemos mirar por nosotros. Del mismo modo, pienso es que los Juegos Olímpicos van a ser un poco distintos en cuanto a que no vamos a poder disfrutar de otras competiciones, igual no tenemos la oportunidad de poder ir a ver otros deportes y eso sí que creo que es algo que ha sido siempre un poco la esencia. Cuando yo he participado en otros Juegos Olímpicos, tener la oportunidad de pasear alrededor de la Villa, de ver a jugadores y jugadoras que nunca la vida hubiera pensado que podría estar a su lado... No tener esa oportunidad en Tokio da un poco de pena, pero no sé realmente cómo va a suceder todo.

Respecto a sus Juegos Olímpicos, logró una medalla de bronce en Londres 2012, la única presea Olímpica y mejor posición de 'Las Guerreras' en unos Juegos. ¿Cómo lo recuerda?

Pues aquello fue increíble. Yo creo que nadie esperaba que estuviéramos ahí. En los anteriores Juegos Olímpicos, nunca se había dado la oportunidad de conseguir una medalla o de estar cerca de ellas. Pero sí que es cierto que este grupo que teníamos ya llevábamos durante dos o tres campeonatos estando dentro del podio o muy cerquita de él. Y bueno, yo creo que nadie consideraba que fuera a pasar, pero al mismo momento sabíamos que todo lo que teníamos, íbamos a ponerlo ahí. Y así fue. Fue increíble el espíritu de equipo y las ganas y la fuerza que en una competición como los Juegos Olímpicos te da simplemente por estar ahí. Se me pone la piel de gallina porque es increíble.

¿Qué es ese algo que tienen los Juegos para que sean diferentes a otras competiciones?

La verdad es que no sé que es ese algo. Por un lado no juegas en casa, pero el rival contra el que estás jugando tampoco, y aún así tienes una organización increíble, cuentas con un pabellón repleto de gente que, aunque anime al otro, tienes a 9.000 personas que simplemente están mirando a lo que a lo que nosotras estamos haciendo. Yo creo que los Juegos te dan unas emociones y unas ganas de competir distintas. Además, evidentemente estás representando a tu país y tienes todas las ganas de poder hacerlo bien, de llegar lo más lejos posible.