Cabezas bajas, lágrimas y un estado general de desolación. Así se vio a los 'Gladiadores', como se conoce a la selección argentina de balonmano, tras su último encuentro del Campeonato del Mundo de Balonmano 2021, que se disputa en Egipto.
Un empate ante la selección de Catar le bastaba para avanzar a cuartos de final, un lugar inexplorado por la escuadra argentina en un Mundial. Sin embargo, faltó una acción, un solo gol, para conseguir la hazaña. El pasado lunes, 25 de enero, Argentina perdió por 25-26 ante Catar.
En un duelo de banquillos españoles, con Manolo Cadenas dirigiendo a Argentina y Valero Rivera haciendo lo propio en Catar, parecía llevar la delantera Cadenas, ya que Argentina comenzó el partido con un arrollador parcial de 11-4. Sin embargo, Catar no bajó los brazos y acortó distancias hasta llegar al descanso solo un gol por debajo en el marcador (13-12). En el segundo tiempo, los 'Gladiadores' volvieron a tomar pronto ventaja, pero los inspirados Rafael Capote y Frankis Marzo -de orígenes cubanos aunque nacionalizados en Catar-, llegaron al fondo de la red jugada sí, jugada también. Y así deshacieron los sueños de Argentina.
"Creo que fuimos mejores durante 45 minutos, y ellos fueron mejores en los últimos 15, que al final son los que importan. Llegar hasta acá y perderlo por detalles da mucha bronca. Estoy muy satisfecho del equipo, de lo que dio. Ha estado muy cerca, a un solo gol, de estar entre los ocho mejores equipos del mundo", analizó para la Confederación Argentina de Handball el central Sebastián Simonet.
A la espera de su retirada después de Tokio 2020, Simonet, además, se despidió con el sabor agridulce de sus participaciones en los Mundiales. "Probablemente sea mi último partido en un Mundial, y estoy muy orgulloso de estar acá", dijo. También probablemente este fuera el último choque en una cita mundialista para otra leyenda del handball argentino, Gonzalo Carou.
Pero a pesar del mal sabor de boca de los 'Gladiadores', pueden levantar ya la cabeza. Argentina ha logrado su mejor clasificación histórica en un Mundial, con su plaza 11ª, que mejora la 12ª conseguida en 2011 y 2015.
Esta hazaña la ha conseguido con victorias de renombre, de las que hacen afición, como la conseguida ante Croacia por 23-19, con un Leo Maciel incontestable bajo palos, donde logró un 43% de efectividad (12 paradas).
Pero la desilusión tornará en más ganas si cabe en el próximo objetivo de la selección de Argentina: los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
El combinado dirigido por Manolo Cadenas clasificó para la cita Olímpica tras ganar el Panamericano en 2019, y así tiene su plaza asegurada para disputar sus terceros Juegos Olímpicos consecutivos.
En sus dos apariciones, Argentina finalizó 10ª en la clasificación, y, con el juego mostrado en el Mundial, es factible que pueda superar esta marca en la capital japonesa.
La competición de handball en los Juegos Olímpicos de Tokio comenzará el 24 de julio, y la gran final masculina se disputará el 7 de agosto de 2021 en el Estadio Nacional de Yoyogi.
En el torneo Olímpico, Argentina intentará de nuevo hacer historia... y está en el camino de lograrlo.