Dorian Keletela es un joven velocista que se entrena en Portugal con el apoyo de una Beca para Atletas Refugiados del COI.
Nacido en la República Democrática del Congo en 1999, Keletela llegó a Portugal con su tía en 2016 tras perder a sus dos padres en el conflicto del Congo.
Ahora tiene como objetivo competir en la pista de atletismo, codo con codo, con los más rápidos del planeta en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, en el verano de 2021.
En la actualidad, corre con el Sporting Clube De Portugal en Lisboa y está cada vez más cerca de conseguir un tiempo inferior a 10 segundos en los 100m, con la intención de inspirar a la próxima generación, tal y como declaró en la cuenta de Instagram del Equipo Olímpico de Refugiados:
“Quiero que, al finalizar mi carrera, los jóvenes recuerden mi nombre como una inspiración". - Dorian Keletela
Es uno de los 37 beneficiarios de la Beca para Atletas Refugiados que optan a formar parte del Equipo Olímpico de Refugiados del COI para Tokio 2020, que se anunciará en junio de 2021.
La resiliencia es una forma de vida para Keletela.
Perdió a sus padres a una temprana edad y tuvo que mudarse con su tía, que más tarde pidió asilo en Portugal junto a un joven Dorian.
Al llegar a Portugal con sólo 17 años, pasó más de un año en centros de refugiados y se dedicó a aprender un nuevo idioma y a adaptarse a una nueva forma de vida.
Como en el caso de muchos refugiados, el deporte siempre le ha proporcionado un espacio seguro para divertirse, para soñar, para evadirse. Empezó a correr a los 15 años y la pista se ha convertido en su segundo hogar. Ahora entrena tres horas al día, seis días a la semana, con un objetivo en mente.
En febrero de 2020 corrió los 60m en 6,49s, luego los 100m en agosto de 2020 en 10,46s, y hay muchas expectativas de que pueda bajar su marca personal en esta temporada al aire libre.
Recientemente, Keletela declaró en el Facebook del Equipo Olímpico de Refugiados que:
"Lo que quiero que la gente sepa sobre mí es que soy una persona decidida que nunca se rinde y persigue sus sueños".
"Mi lema en la vida es avanzar con fe, determinación, valor, paciencia y perseverancia".
Incluido en la lista de preseleccionados para el Equipo Olímpico de Refugiados de Tokio 2020, tiene la motivación de dar el siguiente gran paso y formar parte del equipo para Tokio.
"Es un gran orgullo para mí trabajar duro por formar parte de la lista final de atletas", declaró a la Sports Gazette del Reino Unido.
"El deporte es muy importante en mi vida porque me permite estar saludable y valorarme como persona", continúa.
"Me siento seguro en Portugal porque hay libertad y se respeta a los seres humanos".