Yakelín Estornell: el peso de la historia de las mujeres boxeadoras de Cuba está en sus guantes
Yakelín Estornell nació en Guantánamo (Cuba) hace 38 años y es la única boxeadora mujer de esta nación que peleará en el Clasificatorio Mundial de Boxeo a los Juegos Olímpicos de París 2024 que se disputa en Bangkok, Tailandia, del 24 de mayo al 2 de junio.
Aunque todo esto pueda parecer algo normal, especialmente teniendo en cuenta que Cuba es una de las potencias del boxeo olímpico, nada lo es.
En diciembre de 2022, Yakelín Estornell era entrenadora de lucha en Guantánamo. Fue entonces cuando se aprobó que las mujeres pudieran practicar boxeo de manera oficial. Esta noticia le cambió la vida, o más bien le permitió vivir una nueva.
En enero de 2023 la Escuela Nacional de Boxeo de Cuba se abrió para las mujeres y, en menos de diez meses, tres de las doce púgiles que componen el equipo élite participaron en los Juegos Panamericanos Santiago 2023.
Estos fueron el primer clasificatorio en el que Cuba pudiera mandar por primera vez en su historia a púgiles mujeres a los Juegos Olímpicos. No lo lograron, como tampoco pudo ser en el Primer Clasificatorio Mundial a París 2024 que se disputó en Busto Arsizio, Italia.
Ahora solo queda una última oportunidad en el Segundo Clasificatorio Mundial de Tailandia y una sola boxeadora a lograrlo: Yakelín Estornell.
"Lograr la clasificación olímpica sería un orgullo para el pueblo de Cuba, serían por primera vez en boxeo que mujeres clasifiquen a los Juegos Olímpicos", reconoce para Olympics.com la púgil, que compite en -66 kg.
Ella es la personificación del sueño común del boxeo cubano femenino; de las Marianas del boxeo, como se les conoce a las púgiles de Cuba en honor a Mariana Grajales, quien es considerada como la Madre de la Patria y símbolo de la mujer cubana tras consagrar su vida a la lucha por la independencia en el siglo XIX.
"La mujer cubana es muy fuerte y se sabe sobreponer. Yo trato de dar lo mejor de mí también y es un orgullo para la mujer cubana representar en cada deporte, y ahora más en el boxeo femenino, que es un deporte nuevo", define Estornell. "Es un orgullo representar al boxeo femenino, a la mujer en general".
Yakelín Estornell, entre la lucha y el boxeo
En su 'anterior vida', Yakelín Estornell fue una luchadora que llegó incluso a ser subcampeona en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015. Cuando se retiró, siguió conectada a ese deporte siendo entrenadora en la EIDE [Escuela de Iniciación Deportiva Escolar] de Guantánamo.
Cuando las autoridades oficializaron el boxeo femenino de Cuba, se intentó que las primeras deportistas que llegaran al equipo nacional vieran de otros deportes para ayudar en su adaptación al régimen deportivo.
Esto propició que Estornell tuviera las condiciones perfectas para sumarse a la aventura. Para ser una pionera.
"Pienso que la lucha me ha ayudado un poco por el empuje y, con respecto a mi preparación física, me siento bien", analiza Estornell.
Yakelín Estornell, madre de otro luchador
Los 38 años de Yakelín no solo le han dado una vida de atleta de élite en dos deportes, algo no alcanzable para todos, sino que también le han dado lo primero que a ella le define: Yakelín Estornell es mamá.
Tiene un hijo de 14 años, Alexei, quien sigue los pasos de ella: practica lucha libre en la EIDE de Guantánamo.
"Yo le dije que no era obligado que fuera luchador. Me dijo 'Mamá, yo quiero. Yo quiero seguir tu ejemplo, ser luchador también'", rememora la ahora boxeadora.
Desde que se inició en este nuevo deporte, Estornell vive temporadas alejada de él, ya que la Escuela Nacional de boxeo femenino de Cuba, la Escuela La Cardín, que comparten los boxeadores varones juveniles y las boxeadoras mujeres, se encuentra la Habana, detrás del Estadio Panamericano de atletismo.
En total, son más de 900 kilómetros los que separan a Yakelín de Alexei. Y es por ello que el apoyo de su familia fue crucial cuando ella decidió encontrar su segunda vida como atleta. "Ellos siempre me ayudan. Ahora mismo él [Alexei] está con su papá y la familia me apoya en todo", reconoce.
Sin embargo, y a pesar de la distancia, el amor entre sí y su pasión por el deporte es algo que les mantiene unidos.
"Pienso que Alexei va a ganar medallas olímpicas. Su madre es una mujer valiente y también ha salido adelante. Él es un orgullo para mí", se sincera sobre su hijo Yakelín.
Julio César la Cruz y Arlen López, una inspiración
Aunque las mujeres del equipo nacional de Cuba lleven entrenando un año y medio, la tradición del boxeo cubano en los Juegos Olímpicos se escribe con letras doradas.
En París 2024, dos púgiles podrían entrar al selecto grupo de boxeadores con tres medallas de oro olímpicas: Julio César la Cruz y Arlen López.
"El boxeo en Cuba es el buque insignia de nuestro país. Sigo mucho a los varones, como Julio César o Arlen López, que son campeones olímpicos, campeones mundiales... Y cada vez que tenemos la oportunidad de estar con ellos, siempre busco estar al lado de ellos, los miro y trato de hacer casi lo que ellos hacen en el entrenamiento para saber reponerme en la competencia y lograr mi objetivo. Los campeones olímpicos y mundiales que tenemos ahora mismo al lado de nosotras son una inspiración para nosotras. Yo los admiro mucho a ellos".
"Julio me ayuda mucho también en el entrenamiento y eso es muy bueno para nosotras y para mí personalmente, para mejorar mi técnica", reconoce Estornell.
Pero no todo es técnica. Cuando estás empezando en un deporte, además, necesitas un aliento extra.
"Julio siempre me dice 'Vamos, que sí se puede. Tienes que esforzarte, no te puede cansar en la pelea'. Él me ayuda mucho, me apoya", continúa explicando.
Yakelín Estornell, pionera de un cambio social
El boxeo femenino cubano está dejando de ser algo ajeno a la comunidad, especialmente gracias a la llegada de las primeras medallas (tanto Estonell, como Legnis Calá y Arianne Imbert lograron preseas en los Juegos del ALBA 2023) y la realización de las primeras competencias del boxeo femenil en Cuba, como los Nacionales de 2023.
"Mis compañeras, gente de la calle y algunos trabajadores me dicen 'Te he visto pelear y eres muy fuerte. Me gusta tu forma de pelear y te esfuerzas mucho'. Eso me da mucho orgullo", reconoce Estornell.
Yakelín entrena en la Escuela de El Cardín, donde no cuentan con agua corriente y las condiciones son limitadas. Ni siquiera esto o el corto tiempo que ha pasado desde que empezaron a entrenar está quebrando su sueño de ser olímpica en boxeo.
Porque eso le define a ella, pero sabe que su misión va más allá de sus guantes.
"Salgo buscar mi victoria en los combates y a poner el nombre de Cuba en alto, y también el nombre de la mujer cubana", sostiene Estornell.
Ella es la personificación de que el boxeo femenil cubano es una realidad. Es quien saldrá al ring de Tailandia representando a todas las mujeres de Cuba.
Y, pase lo que pase en Bangkok, lo más positivo de esto es que el cambio social ha comenzado y no se va a detener. Lo más positivo es que hay futuro para las Marianas del boxeo cubano.
"Cuba dará en boxeo mujeres mundiales y olímpicas".
Boxeo en vivo: dónde ver a Yakelin Estornell en el Clasificatorio a los Juegos Olímpicos de París 2024
El segundo clasificatorio olímpico global de boxeo para París 2024 podrá seguirse en directo por streaming a través de Olympic Channel, vía Olympics.com.