Cómo Rubén Limardo quiere alcanzar la gloria en los Juegos Panamericanos 2023 por Venezuela y su familia

Por Maggie Hendricks
4 min|
Ruben Limardo
Foto por Photo by Hannah Peters/Getty Images

El campeón olímpico de esgrima en Londres 2012 se apoya en la unión familiar para buscar el éxito en Santiago 2023 y tiene grandes metas para los Juegos Olímpicos de Parírs 2024.

Rubén Limardo tiene en su palmarés la medalla olímpica de esgrima con espada que ganó en Londres 2012, y las dos medallas de plata que ganó en Campeonatos del Mundo. Pero el bronce que logró en el Mundial de Esgrima 2023 tuvo un sabor distinto, especial, porque fue una medalla de equipo.

“La verdad, fue muy emocionante, porque trabajamos todas nuestras vidas para alcanzar ese objetivo, y un resultado así para el equipo”, explica Limardo en una entrevista exclusiva con Olympics.com. “Y lo disfruté aún más porque tengo a mis dos hermanos en la selección de Venezuela. Siempre soñamos con algo así y nos puede dar una gran oportunidad para luchar por una medalla en los Juegos Olímpicos”

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La esgrima fue asunto de familia desde el primer día. Rubén Limardo empezó en este deporte a través de su tío Ruperto, que aprendió esgrima mientras estudiaba en Hungría durante los años ochenta. Ruperto se llevó el deporte consigo a Venezuela, y lo enseñó a sus sobrinos. Ahora, esos hermanos están ayudando a Venezuela a convertirse en un país a tener en cuenta en la esgrima. En la competición masculina de espada del pasado Mundial, solo quedó por detrás de las dos grandes potencias, Italia y Francia

“Fue muy difícil, pero creo que cuando las cosas son difíciles es cuando más las disfrutas. Para nosotros, conseguir esa medalla de bronce, la primera en la historia de nuestro país, y recibir las felicitaciones de países como Francia o Italia nos hizo muy felices”, asegura Limardo.

Rubén ganó esa medalla de bronce junto a sus hermanos Jesús y Francisco, y Grabiel Lugo. Aunque está acostumbrado a hacer esgrima con sus hermanos, confiesa que formar equipo con la familia tiene sus dificultades.

“No es sencillo, porque las emociones pueden estar conectadas con el trabajo de equipo, tienes que estar muy concentrado, muy calmado, y seguir bien las instrucciones. En esta ocasión, dejamos que fuera el entrenador quien hablara con cada miembro del equipo, y como hermanos solo ofrecimos apoyo, palabras de motivación, y creo que nos funcionó bastante bien”, relata Rubén Limardo.

“En el pasado hubo problemas porque, como hermanos, no sabíamos ver la diferencia a la hora de comunicarnos. Las emociones a veces nos afectaban y teníamos que estar muy atentos para poder manejarlas. Pero esta vez trabajamos como un equipo”.comit

Rubén Limardo, durante la competición de esgrima de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Foto por Matthias Hangst/Getty Images

Big expectations for the Pan American Games

El próximo reto para Rubén Limardo son los Juegos Panamericanos Santiago 2023. En su poder tiene ocho medallas en los Panamericanos desde Guadalajara 2011. En Lima 2019, se enfrentó en la final de espada a su hermano Jesús. Ahora espera sumar más metales a su palmarés y al de Venezuela.

“Ojalá estemos en la final para darle una medalla a Venezuela. Sé que no va a ser sencillo, pero lo afrontamos como equipo, nuestro objetivo es encontrar ese [espíritu de equipo] que no logramos en Lima 2019 y sí podemos lograr en Chile”.

Rubén sabe que llega a los Juegos Panamericanos como uno de los favoritos, pero confía en que su experiencia lo ayude a manejar la presión.

“Como favorito, la presión siempre está ahí. La experiencia es lo que te ayuda a dominar esa presión y ese miedo que pueden venirte, porque somos seres humanos. Puede que como deportista haya ganado muchos títulos, pero aún me pongo nervioso, siento ansiedad”, confiesa Limardo. “Pero la experiencia ayuda mucho a controlar todo eso, y por supuesto siempre voy a ser objetivo, y a concentrarme en el oro, que es lo más importante para nosotros”.

Después de los Panamericanos, su siguiente objetivo serán los Juego Olímpicos de París 2024. Con la medalla de bronce que ganó Venezuela en el Mundial, y con el historial del propio Rubén Limardo, espera llegar en buen momento a los Juegos.

“[En París 2024] el equipo tiene calidad para competir con los mejores. Esperamos que Venezuela, con mi equipo, pueda ganar una medalla en París 2024”.