De las cinco medallas en Juegos Olímpicos de Invierno en la historia ganadas por deportistas españoles, dos de ellas han sido en el mismo deporte: el snowboard. Y además, de manera consecutiva: del bronce de Regino Hernández en PyeongChang 2018 en cross a la plata de Queralt Castellet en halfpipe en Beijing 2022.
Pero no son los únicos nombres propios que en los Juegos Olímpicos de Invierno han dado esperanza al deporte español. Lucas Eguibar cuenta con dos diplomas olímpicos (el último logrado con su séptima plaza en Pekín) o con el conseguido por Jordi Font en Turín 2006 gracias a su cuarta plaza.
En el mayor escenario deportivo mundial, España es una nación que brilla cada vez más en snowboard y este legado parece no tener fin: ya hay nombres a tener en cuenta de cara a Milano Cortina 2026.
La primera gran referencia a la que mirar es a la propia Queralt Castellet. La española logró en Beijing 2022 la primera medalla de plata para un deportista español en los Juegos de Invierno.
Y nada más lograrla ya avisó: "Solo estoy empezando".
"Estoy en el mejor momento de mi snowboarding. Estoy aprendiendo mucho y cada vez soy mejor. Así que sí, si llego a ellos [los Juegos de Milano Cortina 2026], será una nueva oportunidad para mostrar el snowboarding que tenga dentro en ese momento", dijo en una entrevista para Olympics.com.
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En Milano Cortina, Castellet tendrá 36 años, los mismos con los que otra rider que lo ha logrado todo en el snowboard, la estadounidense Lindsey Jacobellis, consiguió en Beijing 2022 su primera presea dorada olímpica. En su caso, en cross.
Y es también en cross donde otro español buscará en Milano Cortina 2026 su esperada medalla: Lucas Eguibar. El vigente campeón del mundo en esta disciplina ya iba a por medalla en Beijing 2022, pero se tuvo que conformar con igualar su mejor posición en unos Juegos (7º). Si llega a los Juegos de Italia lo hará con 32 años... ¿será la edad de oro para los riders españoles?
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¿Quiénes les siguen?
Si llegan a Milano Cortina 2026, tanto Castellet como Eguibar serán sin duda la referencia de la delegación española, pero ya lo están siendo para las jóvenes perlas del snowboard de España que siguen sus pasos.
Varios riders españoles podrían debutar dentro de cuatro años en el máximo escenario deportivo mundial.
Álvaro Romero, de 18 años, se quedó a las puertas de llegar a Beijing 2022, ya que llegó a ser quinto reserva en snowboard cross en su primera temporada a nivel absoluto, en la que, además, llegó a ser octavo en la Copa del Mundo el pasado mes de enero en la parada de Krasnoyarsk y se ha subido a dos podios en la Copa de Europa (un primer y un segundo puesto). Todo ello después de lograr la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo Júnior hace justo un año y en los Juegos Olímpicos de Invierno de la Juventud en 2020.
María Hidalgo, por su parte, es especialista en slopestyle y big air. Debutó en 2014 en la Copa del Mundo, y ahora, con 25 años, es cuando está logrando sus mejores resultados.
Aunque nunca se ha subido al podio de la Copa del Mundo, en la última prueba que ha disputado en esta competición, en Bakuriani en marzo de 2022, logró una quinta plaza en slopestyle.
También ha destacado en la Copa de Europa, donde se ha hecho con dos triunfos (Laax en 2018; y Kapaonik en 2021), además de dos terceros puestos.
Con resultados reseñables en otras competencias como la Copa de Europa o competiciones internacionales júnior se encuentran nombres como los de Antoni Toledo (19 años) y Bernat Ribera (21) en cross, y Nora Cornell (16) en slopestyle y big air.
Así, y aún teniendo a Queralt Castellet y Lucas Eguibar en activo, el snowboard español tiene cuatro años para seguir soñando con una tercera medalla olímpica consecutiva. Candidatos que sueñan con ella no le faltan.