La entrenadora de esports Mia Stellberg sobre cómo controlar las emociones en los esports

Las emociones pueden ser un factor de distracción en los esports.

Si no puedes controlar tus emociones, no sólo te creará un estrés innecesario, sino que también afectará negativamente a tu capacidad de concentración, lo que te llevará a rendir por debajo de tus posibilidades. Esto puede provocar nuevas emociones, ¡y se acabó!

Vamos a dar un paso atrás. Como humanos, tenemos tendencia a generalizar nuestros sentimientos, aplicando las emociones a situaciones que podrían resolverse de forma lógica. La clave está en comprender la diferencia entre el pensamiento emocional y el racional, además de centrarse en las cosas adecuadas para alcanzar una mente clara y centrada.

Los gamers profesionales estiman que los factores mentales durante el juego afectan al resultado final entre un 50% y un 80%. Practicar cómo regular las emociones puede mejorar seriamente tu juego, ya que te ofrece una mayor sensación de control y te permite centrarte en lo más importante.

Esports: una técnica para regular sus emociones

Muy a menudo, los gamers se centran en la tarea en sí en vez de en la ejecución, lo que les hace vulnerables al fracaso. Concentrarse en lo que está ocurriendo ahora y en lo que hay que hacer a continuación debería ser lo único en lo que pensar mientras se juega. Cuando estamos concentrados, no hay obstáculos en nuestro camino, ni emociones que enturbien nuestra toma de decisiones. Una mejor concentración, en definitiva, significa una mejor toma de decisiones y reacciones más rápidas, habilidades que todos los gamers desean.

Cuando controlas tus emociones, básicamente construyes un escudo que te protege de posibles factores de estrés y mejora tu rendimiento: ¡estás en la zona! Cuanto más tiempo permanezcas en la zona, manteniendo un estado de ánimo estable, más tiempo podrás rendir al máximo. Para permanecer en la zona, debes ignorar las distracciones externas, como quién te está mirando, cómo pueden reaccionar los demás ante el resultado o pensar "¿qué pasa si cometo un error?". Permitir que entren esos pensamientos sólo conduce a la falta de concentración y a una merma del rendimiento.

Para mantener la concentración durante todo el partido, es esencial hacer del entrenamiento mental un objetivo prioritario. Permítanme compartir con ustedes una técnica que recomiendo como calentamiento antes de una sesión de juego. Este ejercicio permite contextualizar y procesar los pensamientos, miedos y preocupaciones antes de empezar a jugar.

¿Preparados?

Quiero que crees una imagen mental de cómo se sentirá 'eso' (¿qué es exactamente 'eso'?), cómo será su aspecto, cómo sonará, etc. Ahora, di tus expectativas en voz alta. Reflexiona sobre ellas durante unos instantes. A continuación, quiero que compartas tus preocupaciones e inseguridades.

Ahora es el momento de responder a esta importante pregunta: "¿Cómo te gustaría sentirte?". La respuesta puede ser: "Me gustaría sentirme seguro de mí mismo cuando salgo al escenario" o "Me gustaría estar concentrado cuando juego". ¡Fantástico! Ahora, debes practicar la manifestación de esas imágenes y sentimientos.

Un buen gamer sabe cómo influir y adecuar sus emociones para mejorar su estado de ánimo y, en última instancia, su juego.

Mia se ha convertido en una leyenda del gaming profesional por su trabajo pionero como psicóloga y por los muchos títulos que ha ayudado a ganar a sus equipos. Entre sus logros se encuentran haber ganado el Major con el equipo Astralis CS:GO y haber ayudado a Dota 2 Team OG a convertirse en el primer equipo de la historia que repite título en TI. También ha entrenado a equipos para conseguir títulos en League of Legends y en juegos para dispositivos móviles. Además, trabaja con muchos deportistas olímpicos y profesionales. Es licenciada por la Universidad de Helsinki y vive en Finlandia.