Cómo entrenan los mejores jugadores de balonmano: las lecciones de Talant Dujshebaev, entrenador del Kielce

El 17 y 18 de junio se disputa la Final Four de la Champions League de Balonmano, con los cuatro equipos más fuertes del viejo continente buscando la gloria final: Barcelona (España), Magdeburg (Alemania), Paris Saint-Germain (Francia) y Kielce (Polonia), con nombres de la talla de Ludovic Fabregas, Kay Smits, Luka Karabatic o Alex Dujshebaev, respectivamente, enfrentándose en el 40x20 del Lanxess Arena de Colonia (Alemania).

Pero el balonmano, y por lo tanto levantar a la postre el preciado trofeo, empieza fuera de él: es un deporte donde la estrategia es clave y los entrenadores tienen un rol crucial. Así, los banquillos de los mejores equipos del mundo también cuentan con grandes mentes como líderes. Y en el del Kielce está sentado alguien que sabe qué es la excelencia en los dos lados, tanto dentro como fuera de la pista: Talant Dujshebaev.

Como jugador, Dujshebaev cuenta en su palmarés con tres medallas olímpicas (oro en Barcelona 1992 con el Equipo Unificado; y dos bronces con España, en Atlanta 1996 y en Sídney 2000) en cuatro participaciones en Juegos (fue séptimo con España en Atenas 2004). A estas, Dujshebaev sumó un oro en el Mundial de 1993 (Rusia) y tres bronces europeos con España.

Además, a nivel de clubes, ganó en cuatro ocasiones la Liga ASOBAL, una Champions League y una Copa EHF, entre otros títulos.

Por todo ello, Dujshebaev está considerado aún hoy como uno de los mejores jugadores de balonmano de la historia.

Como entrenador su palmarés tampoco se queda atrás. Consiguió el título de la Champions League con el Ciudad Real en su primera temporada como entrenador (2005/06). En total suma cuatro en Champions League. El último lo logró en la 2015/2016 con el Kielce, su actual equipo, en el que entrena a sus dos hijos: Alex y Dani Dujshebaev, que siguen los pasos de su padre como referencias en el balonmano internacional.

Antes de disputar una nueva Final Four con el Kielce y de intentar lograr de nuevo el título de Champions League, Talant Dujshebaev ha explicado en una entrevista con Olympics.com sus métodos de entrenamiento, además de cómo es para él entrenar a sus hijos y el significado que tienen los Juegos Olímpicos para un jugador de balonmano.

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Una semana típica de entrenamientos en balonmano, por Talant Dujshebaev

Se toma como referencia una etapa de Final Four de Champions League, de pico de temporada en la que haya un título en juego en un breve lapso de tiempo (en este caso, con un partido el sábado y otro el domingo).

En el caso del Kielce polaco, acaba la liga polaca con cierto margen de tiempo respecto a la Final Four de la Champions League, mientras que otros equipos prácticamente enlazan el final de liga en otros países con el comienzo de la fase final de Liga de Campeones.

"En la semana anterior hacemos el doble de entrenamientos, con un microciclo al principio de la semana y luego hacemos dos partidos amistosos", empieza a explicar Dujshebaev.

Tras ella, esta es la semana típica de Final Four de Champions League para el Kielce:

• Lunes: Entrenamiento físico largo. Trabajo táctico.
• Martes y miércoles: Entrenamiento físico más corto y más intenso.
• Jueves: Viaje y entrenamiento corto (solo técnico), sin sesión de gimnasio.
• Viernes: Entrenamiento corto (solo técnico). "En tierras alemanas tanto jueves como viernes ya es todo puro entrenamiento de técnica [reduciendo el físico] para que no se lesione nadie en este último momento". Sin sesión de gimnasio.
• Sábado: Partido. Antes se realiza una sesión de vídeo de análisis del rival, el mismo día del partido. Sin sesión de gimnasio.
• Domingo: Partido. Antes se realiza una sesión de vídeo de análisis del rival, el mismo día del partido. Sin sesión de gimnasio.

La importancia del descanso y de la preparación física en balonmano

"El descanso es muy importante, sobre todo mentalmente", asegura Talant Dujshebaev. "Desde que soy entrenador, siempre digo que un día a la semana los jugadores tienen que tener sí o sí libre".

Dentro del plan de entrenamiento, además, cuenta con un preparador físico especializado. "Él hace planes específicos dependiendo de la carga mental y física de los partidos que vamos a tener, y también dependiendo de los viajes", explica.

"Por ejemplo, hay semanas en las que unos jugadores vienen de la selección y otros no. Él prepara sus planes dependiendo de esto y cada jugador trabaja el físico de manera diferente. Lo más importante es que el grupo esté en las mejores condiciones para las fechas importantes".

Así, en los dos últimos días previos a partidos clave para el equipo, no realizan sesiones de gimnasio: "Hacemos un calentamiento preventivo y siempre lo lleva a cabo el preparador físico. La primera media hora es de él y nosotros ya empezamos con el trabajo táctico de aproximadamente 45 minutos tras el calentamiento".

El análisis del rival en balonmano, un punto clave en el plan

Talant Dujshebaev suele hacer la sesión de vídeo de análisis del rival en la primera sesión de entrenamiento específica de ese partido en concreto. En principio, el primer visionado para preparar la Final Four lo realizan más o menos dos semanas antes. "Por supuesto, durante esas semanas puedes repetir el mismo vídeo, pero además hacemos sesiones de visionado más específicas: un día acentuado la defensa, otro día acentuando el ataque, etcétera".

¿El Kielce utiliza algún método innovador de entrenamiento?

En principio, y fuera de las actividades deportivas que se pueden hacer en pretemporada al margen del balonmano para, principalmente, trabajar en la unión de grupo (por ejemplo, kayak en río), Talant Dujshebaev explica que no realizan nada fuera de lo normal en sus entrenamientos.

"Todo lo que tenemos que hacer tiene que estar adaptado a mejorar las condiciones físicas y de prestaciones deportivas técnico-tácticas dentro del mundo de balonmano", dice.

Aunque sí que Talant Dujshebaev tiene una receta especialmente innovadora que no duda en aplicar: "La mejor innovación es que, cuando las cosas van mal, des más cariño a los chicos. En ese momento es cuanto tienes que quererles más".

¿Cuál es el mejor equipo de balonmano?

Teniendo esto en cuenta, ¿qué hace de un equipo de balonmano ser el mejor?

"El mejor equipo es aquel que sabe adaptarse y tener un plan B y un plan C en todos los aspectos. Y muchas veces nos equivocamos y preparamos mejor o peor a nuestros jugadores, pero también crecemos junto con ellos", explica Dujshebaev.

¿Qué diferencia al mejor jugador del resto?

A nivel de equipo, lo que marca la diferencia es la capacidad grupal de adaptabilidad. Sin embargo, no es la misma premisa lo que separa a los mejores jugadores del resto, según Talant Dujshebaev.

"El mejor jugador no se esconde nunca en los momentos difíciles", asegura.

"Yo he conocido a jugadores que han sido impresionantes, pero que a la hora de la verdad no respondían de la misma manera y por eso ellos, para mí, nunca van a ser los más grandes".

"Pero, sin embargo, he conocido otros que juegan bien o mal, pero que a la hora de la verdad siempre están ahí; siempre aparecen. Eso es lo que yo más valoro. Puede que sea un jugador más descarado, o con menos descaro; un jugador más confiado en sí mismo; o un jugador más talentoso que otro, pero estos jugadores siempre, siempre están. Pueden cometer un par de errores, pero a la hora de la verdad siempre, no sé cómo, tienen el 99% de acierto y para mí esos son los más grandes de la historia".

Entrenar a tus hijos: cuando el vestuario se instala en casa

No hay dudas de la calidad y la magia de Talant Dujshebaev tanto como jugador o como entrenador.

Pero tiene algo que más que le diferencia de la gran mayoría de técnicos: en su equipo, el Kielce, juegan sus dos hijos: Alex y Dani Dujshebaev.

¿Es más fácil o más difícil su trabajo teniéndoles en el vestuario?

"Esta pregunta me la hacen muchas veces y siempre es muy difícil de contestar, pero a la vez muy fácil. Es muy difícil porque siguen siendo tus hijos y es fácil porque, como siempre digo, intento tratar a mis jugadores como si fueran mi familia y por eso nunca me resulta extraño o difícil exigir a mis hijos de la misma manera que a los demás porque el trato que estoy intentando dar es de cariño, y cuando estás dentro del vestuario, yo no tengo dos hijos, sino 18 ó 20 hijos".

"He tenido la suerte de hablar con muchos padres que han sido los entrenadores de sus propios hijos, por no ir tan lejos, Valero Rivera, que es un gran entrenador, y su hijo, que es un gran deportista. Y los consejos de muchos entrenadores de sus hijos me han ayudado mucho", explica Talant Dujshebaev.

Aunque hay muchas comparativas en el estilo de juego de Dujshebaev padre con su hijo mayor, Alex, Talant cree que no hay tanto parecido como se dice: "Alex yo creo que está mucho mejor preparado tácticamente que yo. Segurísimo. Tiene una técnica-táctica individual que es superior a la mía. Dani es totalmente diferente: más grande, de otras características. Dani es mucho mejor defensor que nosotros, así que me resulta más fácil compararme con Alex que con Dani".

Sin embargo, Talant Dujshebaev sí que destaca algo en lo que sus hijos son mejores que él. Pero eso traspasa el 40x20.

"Desde luego yo te diría que son totalmente diferentes a mí. Ellos son mucho mejores personas que yo seguro. Esto es algo que me llena de orgullo: en primer lugar, que son buenas personas".

Y en esto tiene que ver mucho el balonmano, según Dujshebaev.

"El deporte es algo que nos ha hecho mejores. Porque si tú entras en un equipo, siempre miras por el bien del equipo, tienes que hacer amistades, etcétera. Así que yo siempre aconsejo a todos mis amigos cuando tienen hijos pequeños o yo, que ahora tengo dos nietos, siempre voy a intentar que ellos participen en el deporte. El deporte les aleja de la calle, hace que estén más disciplinados, más coordinados, con mejor salud. Todo esto para mí es solo bienvenido".

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Cómo ha cambiado el balonmano: de Talant Dujshebaev a Dani Dujshebaev

Ver el balonmano de tan cerca (primero como jugador, después como entrenador y padre de jugadores) hacen de Talant Dujshebaev una persona con una gran perspectiva de este deporte.

Bajo su punto de vista, el balonmano ha cambiado desde que él era jugador. Y mucho.

"Sin duda no es el mismo balonmano. El ritmo, la preparación física, la preparación médica... todo ha cambiado. El deporte es como los coches: llegaron los motores de dos caballos, de tres caballos... y eso ya era un éxito. Luego se han ido poniendo en lugar de dos marchas, tres, cuatro, cinco, la marcha atrás, etcétera; y todo es así exactamente en el deporte. Evolucionamos de una manera estratosférica y eso es motivo de orgullo porque no sé dónde está nuestro límite, dónde está el límite de lo humano", ejemplifica Dujshebaev.

"Vamos progresando tanto que me asusta: si yo veo el balonmano de los años 80 y el balonmano de ahora, es otro mundo. El mejor coche de los años 80 ahora sería un coche normalito".

Talant Dujshebaev tiene claro que sí, el balonmano ha cambiado. Y precisamente por eso entiende que no se pueden comparar los éxitos de equipos de diferentes épocas o de jugadores en momentos diferentes.

"Compararnos es un error muy grande que cometemos. Yo siempre me acuerdo cuando mi padre me contaba cómo él vivía, como diciéndome qué bien vivimos nosotros. A mi padre eso también se lo hacía a mi abuelo, y yo también se lo cuento a mis hijos. Pero la realidad es que no puedes comparar".

"No puedes comparar a Michael Jordan con Kobe Bryant o con LeBron James. Cada uno ha tenido su época y para mí cada uno es tan glorioso, tan bueno, que yo nunca compararía esto porque es realmente injusto. ¿Por qué? Porque el deporte va en progresión, como todo en la vida".

"La utilización de pabellones, de los cuerpos médicos, del material deportivo, etcétera, era totalmente diferente. Y es difícil, de verdad, decir qué selección ha sido la mejor de la historia. Todos tienen derecho a estar en un pedestal".

"Y por eso no me gusta cuando uno habla de de Pelé, otro de Maradona, otro de Messi. Cada uno ha sido realmente increíble en su época y circunstancias. Eso sucede en cada deporte. Por eso para mí no es lo mismo estar peleando en unos Juegos Olímpicos en el año 56 o 60 que en unos Juegos Olímpicos en 2024".

"Como el otro día, que oí a un periodista hablando de que, como Nadal no iba a Roland Garros, iba a bajar no sé cuántos puestos en el ranking. Y me parece que no aprendemos. Es una injusticia que una persona que gana 14 veces en Roland Garros tenga que demostrar o pelear aún más. Una persona que ha ganado como nadie, y espero y creo que nadie nunca ganará tanto, parece que tiene que seguir demostrando y que tiene que ir a París siempre a jugar en la pista central y siempre jugar como número uno. Pero en eso no se reduce el deporte".

Talant Dujshebaev: el paso de jugador a entrenador

Pero hay otro ámbito que Dujshebaev sí que puede comparar: su propia experiencia como jugador y como entrenador.

"Yo creo que ser jugador es mucho más agradable. Es mucho más bonito porque la responsabilidad es totalmente diferente y tú realmente disfrutas cuando haces tu trabajo. A veces puedes hacerlo bien o no tanto, pero creo que disfrutas mucho más que un entrenador", reconoce ahora, desde el otro lado.

"Si yo hubiera tenido la mentalidad o hubiera sabido cómo era la parte de un entrenador cuando era jugador, seguramente habría sido aún un mejor jugador".

"Sin duda veo el balonmano de manera diferente ahora. Cuando cambias de estar dentro del 40x20 y pasas a los banquillos, lo ves al principio con los ojos todavía de jugador. Yo tuve suerte: el 30 de junio colgué las botas como jugador y el 1 de julio empecé a trabajar como entrenador con un gran equipo. He tenido la confianza suficiente por parte de los directivos del club y eso que me resultó un poco un poco difícil adaptarme a este nuevo rol, porque, aunque yo en los últimos dos o tres años como jugador sabía que iba a ser algún día entrenador, tardas un poco en entrar en la piel de entrenador", reconoce.

Los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992

Talant Dujshebaev, como dice, disfrutó mucho de su etapa como jugador.

Y hay un recuerdo especial entre todos: los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, donde ganó la medalla de oro con el Equipo Unificado.

"El mejor recuerdo que tengo como jugador son los Juegos Olímpicos de Barcelona. Siendo bastante joven, ir a tus primeros Juegos Olímpicos y ganar la medalla de oro ha sido la mejor experiencia".

"He tenido la suerte de estar en los cinco Juegos Olímpicos, cuatro como jugador y uno como entrenador, y para mí los de Barcelona han sido los mejores en cuanto a organización. Nunca he visto algo mejor", reconoce.

Sin embargo, y aunque los de Barcelona 1992 tengan un hueco especial en su corazón y en su memoria, Talant Dujshebaev reconoce que los Juegos Olímpicos, en cualquier edición, son algo diferente y más especial respecto al resto de competiciones.

"Los Juegos Olímpicos es lo máximo para los deportistas", remarca.

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¿Qué es el fracaso en el deporte según Talant Dujshebaev?

Para explicar el efecto de los Juegos Olímpicos sobre un deportista, Talant Dujshebaev pone de ejemplo la reflexión del jugador de la NBA Giannis Antetokounmpo cuando su equipo, los Milwaukee Bucks, cayeron en las series de las Finales de la NBA esta temporada.

Entonces, el jugador griego fue preguntado en rueda de prensa sobre si eso era un fracaso o no. Esta fue su respuesta: "¿Tú consigues un ascenso cada año en tu trabajo? No, ¿verdad? Entonces, ¿cada año que trabajas es un fracaso? No, cada año trabajas para conseguir algo, para conseguir una meta: un ascenso, cuidar de tu familia...".

"No es un fracaso: son pasos hacia el éxito (...). Michael Jordan jugó 15 años y ganó seis campeonatos. ¿Los otros nueve fueron un fracaso? ¿Eso es lo que me estás diciendo? Es una pregunta equivocada. No hay fracaso en el deporte. Hay días buenos y días malos, algunas días triunfas y otros no. De eso trata el deporte: no ganas siempre", finalizó el jugador griego.

Dujshebaev ha querido seguir la línea del jugador de la NBA para explicar el especial significado que tienen los Juegos Olímpicos.

"El otro día nos impactamos con las palabras de Antetokounmpo sobre el fracaso".

"Yo siempre digo que el fracaso es una palabra inventada por la gente que es negativa, pesimista y gente que solo sabe distinguir lo que es blanco de lo que es negro. Pero entre blanco y negro hay tantas cosas...".

"Para mí, solo con participar en los Juegos Olímpicos es algo increíble. Solo vivir en la Villa Olímpica y ver miles y miles de los mejores de los atletas de todo el mundo es algo increíble. Poder competir ahí es algo maravilloso. Y si estás ahí alguna vez, ya es algo difícil de repetir. Yo creo que todo es tan maravilloso, tan bonito, que de verdad que merece la pena solo intentar llegar hasta ahí. Siempre les digo a mis chicos que el fracaso es una palabra que nos tenemos que quitar de la cabeza".