B-girl Stefani sueña con París 2024 después de evitar la parálisis permanente
Cuando la B-girl de Ucrania quedó incapacitada por complicaciones de una hernia hace cinco años, tuvo que elegir entre una cirugía que pondría fin a su carrera o una rehabilitación sin garantías de recuperación.
Nació en Ucrania, pero actualmente viviendo en Londres, B-girl Stefani ha tenido que superar varias dificultades en su carrera profesional.
Anna Ponomarenko, que se su nombre de pila, se quedó con la mitad del cuerpo paralizado en mayo de 2017 debido a entrenar demasiado.
Entonces tuvo que tomar "la mayor decisión" de su vida: pasar por quirófano y poner fin a su carrera en el breaking o una rehabilitación sin garantías de recuperación.
Stefani eligió la segunda y pudo volver a competir meses después.
Ahora, la B-girl de 27 años ha puesto su mirada en el debut olímpico de su deporte en los Juegos Olímpicos de París 2024. Pero se enfrenta a otro desafío: compaginar el breaking con la maternidad ya que espera a su primer hijo en diciembre.
En una entrevista exclusiva con Olympics.com en el Madrid Urban Sports del pasado mes de junio, Stefani habló sobre cómo se recuperó de su lesión, sobre la guerra en Ucrania y sus sueños con París 2024.
"Pensé que mi vida había terminado"
Olympics.com: Hace cinco años, tuviste serios problemas médicos que te impidieron entrenar. ¿Puedes contarnos qué pasó?
B-girl Stefani: Tenía una hernia, pero no lo sabía. Un día, la hernia pinzó el nervio. Me quedé paralizada, la mitad de mi cuerpo se paralizó. En ese momento, cuando te despiertas y abres los ojos y no te puedes mover.... da mucho miedo.
Cuando fui al hospital, me dijeron que tenía dos opciones: una operación, pero no podría bailar nunca más; o la rehabilitación, pero mis nervios podrían quedar dañados y dejarme una parálisis permanente. Fue la mayor decisión de mi vida.
Simplemente no podía imaginarme sin bailar. Para mí, el deporte lo es todo. Y no podía imaginarme sin él... De un día a otro, ya está. Todo ha terminado.
Tenía solo 22 años. Así que me dije: "No voy a quedarme paralizada". Sentía que era una broma, ¿sabes? Así que decidí que trabajaría mucho. Que daría lo mejor de mí para no pasar por quirófano. Fue la mejor decisión de mi vida.
Cuando eres una atleta de élite a veces entrenas más de la cuenta para obtener mejores resultados. ¿Dónde está la línea para ti?
El problema del breaking es que se le empezó a llamar deporte hace poco. Y ahora es cuando sabemos que tenemos que hacernos revisiones, que tenemos que cuidar de nosotros mismos y visitar a los médicos. Pero antes no lo sabíamos.
Visité por primera vez a un médico cuando llevaba diez años practicando deportes porque nadie nunca me había dicho que tenía que tener cuidado. Tienes que recuperarte corporalmente. No puedes entrenar tres veces al día sin tomarte un día de descanso. Para mí, fue difícil entender que tenía que tener cuidado con mi cuerpo. Por eso teníamos tantas lesiones, y por eso muchos breakers han tenido que parar sus carreras tan pronto. Pero ahora que tenemos información, empezamos a convertirnos en más profesionales.
Creo que ahora todo el mundo entiende que tienes que cuidarte a ti misma y que tienes que empezar a hacer caso a tu cuerpo. Si estás cansada, tienes que descansar. Si sientes que tienes un problema, tienes que ir al médico.
¿Por qué crees que te forzaste tanto a ti misma hasta ese punto?
Empecé a hacer deporte cuando tenía cuatro años. Después del colegio, entrenaba mucho: hice patinaje sobre hielo, muchos deportes diferentes, y toda mi vida giraba entorno a eso. No podía imaginar que eso se iba a detener. Así que no tuve otra opción, o ni siquiera tiempo para pensar en qué haría si tuviera que dejar el deporte.
Eres de Ucrania y, por supuesto, debe de ser complicado seguir concentrada cuando hay una guerra allí. ¿Cómo consigues hacerlo?
Mi familia está allí. El primer mes y medio no pude entrenar porque era muy difícil pensar en que no podría visitar a mi familia más, que algo podría pasarles. Era muy difícil porque mientras yo estaba a salvo en el Reino Unido, las personas más importantes para mí estaban en un lugar peligroso. No es seguro estar allá, pero mi familia intenta seguir con su vida. Intentan disfrutar del momento.
Ellos creen en mí. Ellos quieren que yo sea feliz. Quieren que dé lo mejor de mí paso a paso. Por eso quiero darlo todo y hacer algo. Para mi familia, es mejor si hago y consigo cosas. Sé que si tengo una vida mejor, puedo ayudarles.
Nelson Mandela dijo que el deporte tiene el poder de llevar a la paz. ¿Qué piensas sobre esto?
Quiero realmente pensar que esto es verdad porque nosotros, los ucranianos, intentamos estar juntos en esto. Somos fuertes porque somos gente realmente talentosa y vamos a estar bien. Espero que todo llegue a estar bien en mi país.
¿Qué sientes sobre que el breaking vaya a hacer su debut olímpico en París 2024? ¿Te ves allí?
Estoy muy emocionada sobre ello. Cuando nos enteramos de que iba a ser un deporte olímpico, hubo diferentes opiniones. Muchos breakers preferían que se mantuviera como una cultura urbana; no entendían cómo iban a compaginar el breaking y el deporte.
Pero para mí, es una motivación diferente. Estoy acostumbrada a hacer deportes. Como he dicho, yo solía patinar. Ya sabes, cuando haces deportes lo haces por diversión, no por presionarte a ti misma. Pero cuando lo haces como profesional, se te abren muchas oportunidades. Se te abre el futuro. Y eso me motiva mucho. Deseo poder llegar a los Juegos Olímpicos de 2024.